Por Gerardo Rivadeneyra
Luego de que José Narro Robles decidió dar un paso al costado en plena carrera por la dirigencia nacional del PRI y renunciara al partido, tras 46 años de militancia, Alejandro Moreno Cárdenas, “Alito”, se perfila como el próximo dirigente del partido tricolor.
Y es que diversos sondeos y encuestas dan a Moreno Cárdenas una amplia ventaja, además de que el campechano cuenta con muchos apoyos de los pesos pesados al interior del Revolucionario Institucional.
Por ejemplo, una encuesta de México decide, colocaba en abril a Alito con el 48.6 por ciento de las preferencias de los militantes tricolores y hasta Ivonne Ortega, compañera de fórmula de Narro, tenía un 31. 3 por ciento de los posibles sufragios; en tanto, Narro sólo contaba con el 9.3 por ciento de las simpatías.
“Hoy hago pública mi decisión de renunciar a formar parte de la #simulación en el proceso de elección de la nueva dirigencia de mi partido, pero también mi renuncia al PRI Oficial México, partido en el que milité por más de 46 años”, tuiteó Narro al anunciar su retiro.
Tras la renuncia, a líder nacional priista, Claudia Ruiz Massieu, lamentó que Narro se bajara de la carrera y dijera adiós al tricolor.
“En el @PRI_Nacional lamentamos la decisión de @JoseNarroR de renunciar a nuestro partido. Reconocemos su trayectoria, prestigio y sobre todo su calidad moral y compromiso con México”, tuiteó Ruiz Massieu.
Narro esgrimió para su salida simulación en el proceso para elegir al nuevo presidente del PRI y hasta la intromisión del Gobierno federal en la interna.
Usuarios de medios digitales le contestaron a Narro y a otros dirigentes que manifestaron la misma intención que quién entregó al partido es la corrupción y ellos mismos, no Alito.