Noticias MX.- Militares de Infantería y Caballería en activo mostraron su molestia por no tener posibilidad de repeler las agresiones de la delincuencia con el mismo poder de fuego y por ser humillados por civiles durante sus operaciones en el interior del País.
También manifestaron su desacuerdo con la decisión presidencial de revelar el nombre de la cabeza del Grupo de Análisis de Información del Narcotráfico (GAIN) tras el operativo fallido en Culiacán, Sinaloa.
“Es como si se exhibiera al culpable de la operación, sea o no el mando que haya estado en Culiacán, decir quién fue el responsable se me hace un acto de mala fe, de traición, porque no solo se le señala por la falla, sino que se le exhibe a la delincuencia, se le pone en riesgo”, opinó un coronel de Infantería que realiza tareas de seguridad en el Estado de México.
Por separado, soldados que realizan distintas misiones en las fuerzas armadas aseguraron a Grupo REFORMA que en los cuarteles existe un desgaste de las tropas por los constantes operativos de seguridad en zonas críticas.
“La gente se duerme en donde sea, trae un rezago de sueño, no se come bien, no siempre hay raciones calientes, se enfrenta esta situación en climas adversos, es mucha la exigencia de los mandos por estar en todos lados”, lamentó un sargento de Infantería que desmontó su jornada de trabajo, procedente de Guanajuato.
“A la hora de las agresiones viene el problema, porque al estrés de ser blanco de la delincuencia se suma que no podemos actuar como se nos ha entrenado, tenemos las manos amarradas, ahora nos lanzan piedras o nos insultan, nos patean a los compañeros y no podemos hacer nada”.
Un teniente de Caballería que realizó operaciones de seguridad en Guerrero añadió que no existe en el sentir de las tropas un cobijo por parte de sus mandos, debido a la presión para reducir la violencia.
“El que se expone es uno, está uno en la primera línea de la agresión, ya un compañero perdió la pierna en Culiacán, otro perdió la vida, para eso somos los soldados, para estar al frente y enfrentar esta violencia, estamos para recibir órdenes, pero no se puede decir que un militar actuó solo y no recibió órdenes, y mucho menos decir su nombre en público, eso es no sentirte protegido por tus propios jefes”, reprochó.
“Queda claro que si no existen garantías para dar a conocer los nombres de quienes cuentan con información sensible, menos para los demás, se desnudó al Ejército”, abundó otro coronel que realiza tareas de seguridad en el Estado de México.
Generales de División retirados también criticaron que no exista un respaldo a las tropas que combaten a la delincuencia.
“Está prohibido por la ley, porque puede haber represalias, revelar los nombres de los mandos que dirigen las operaciones, pone en riesgo la vida del mando y su familia, además cada soldado tiene una cadena de mando, nadie actúa por cuenta propia, el operativo se supo desde arriba”, criticó el general de División retirado Luis Garfias.
“La Defensa debe llevar a cabo una investigación (del operativo) y si hay responsables castigarlos en un Consejo de Guerra, debe hacerlo de forma correcta y sin propaganda, porque hay asesinos afuera que buscan venganzas”.
El militar retirado indicó que existen inquietudes, molestia e inconformidades dentro del Ejército por que no se le deja actuar.
“Ha sido muy humillante ver a soldados u oficiales que han sido amenazados o golpeados, incluso afuera de Palacio Nacional, los soldados no están para eso, no son policías, están hechos para actuar y requieren protección legal”, sugirió Garfias.
El general de División retirado Carmelo Terán aseveró que en el operativo de Culiacán falló la inteligencia y que eso deberá investigarse.
“No nos gusta a los militares esto, pero es un decisión tomada indiscutible y es responsabilidad del Comandante Supremo, debemos aceptarla, estábamos acostumbrados a la seguridad”, sostuvo.
“Ahora, esto es como el fútbol, si hay un error del portero es gol y culpa de él, pero si no se comete decimos que ganamos todos, el operativo falló en la inteligencia y deberá investigarse, pero son los riesgos que se corren”.