La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
El primer mandamiento de la partidocracia: amarás la línea más que a ti mismo
Días atrás, un grupo de senadores de oposición, planteó una solicitud de consulta popular y pidió, a la SCJN, que dictamine su viabilidad. La idea es inquirir a la ciudadanía, si está de acuerdo o no, en que se de una pensión universal a los damnificados del COVID19.
Desde luego, la intencionalidad política es crear un contrapeso a la propuesta del Ejecutivo, que busca enjuiciar a los ex presidentes, o sea, es una disputa por los favores del electorado.
Por ello, es de llamar la atención (sobremanera), que dos senadores de Morena se hayan sumado a la petición: Ricardo Ahued y Armando Guadiana.
Lo de Ahued no es nuevo, antaño ha votado en contra de los posicionamientos del PRI, su ex partido, siempre argumenta que su compromiso es con la sociedad.
Se reconoce la congruencia de Ricardo, no obstante, su posición en veneno puro para la partidocracia, que se fundamenta en la disciplina. La institucionalidad, dirían los tricolores.
Cuenta la leyenda, que en una ocasión le sugirieron a Javier Duarte, que impulsara la candidatura del citado para la gubernatura, la respuesta lacónica fue: no es confiable.
En efecto, un político que procede en conciencia, no es de fiar para las elites del poder. Pero no se preocupe senador, si lleva gusto, puede construir un proyecto independiente, es la alternativa para que los rebeldes tengan causa.
