Tania Itzel Vargas
CIUDAD DE MÉXICO, 2 de julio (AlMomentoMX).- Las puertas de los vagones del metro se abrieron en la estación Zócalo, en punto de las 10 de la noche, y la multitud descendió llena de júbilo. Entre aplausos, risas y el ya famoso grito: “Es un honor estar con Obrador”, el ambiente estaba lleno de sonrisas entre desconocidos, de hermandad y de incredulidad. Al fin y al cabo, han pasado 12 años en los que los seguidores del ahora presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador, se habían quedado con el ya casi.
Pero, ahora sí se pudo. Y aunque llevaban dos sexenios, uno panista y otro priista, esperando este momento, no se la podían creer. Caminamos hacia el Zócalo, el escenario ya estaba dispuesto para la celebración con AMLO. La pantalla con letras rojas anunciaba: Andrés Manuel López Obrador (AMLO), Presidente 2018-2024 y la música del mariachi nos recibió con notas esa melodía que nos llega al corazón a todos los mexicanos: “México Lindo y Querido”.
No les voy a fallar pic.twitter.com/ABtjyauaoR
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) July 2, 2018
La plancha del Zócalo capitalino se fue llenando rápidamente, pero también las calles aledañas y la Alameda. Eran las 10:30 de la noche y AMLO todavía no llegaba a dar la conferencia de prensa que se esperaba diera en el Hotel Hilton ,frente al Hemiciclo a Juárez. Al grito de “sí se pudo” y “Presidente”, la multitud pedía ansiosamente que se transmitiera la conferencia en la pantalla del escenario, pero no fue posible complacer a los amlovers.
Luego de las 11 de la noche, la gente ya estaba desesperada, porque AMLO apareciera en el escenario. El mariachi hacía su mejor intento de entretener a los que por más de 12 años habían sido fieles a quien representaba a la izquierda mexicana. Estaban ahí los ancianos quienes habían hecho no solo el esfuerzo de salir a votar sino de estar con sus familias a esas horas de la noche en el Zócalo capitalino. Estaban aquéllos que en el 2006 habían apoyado a AMLO en el campamento de Reforma, luego del robo a manos de Calderón y de la mafia del poder, como el candidato de Morena le llama al sistema.
Pero también estaban los estudiantes del IPN, los de la UNAM, estaban los de la Ibero, estaban los de la UVM, aquellos que han llenado tantas veces la Plaza de las Tres Culturas, donde solían reunirse con Andrés Manuel. Estaban todos esos jóvenes que apenas hace seis años habían movilizado a todo un país con sus marchas AntiPeña y habían renovado las esperanzas de todo un pueblo que parecía aletargado. Esos mismos jóvenes que apenas hace seis años terminaron la noche del 1 de julio, llorando, sentados en la Plaza de la República, en el campamento del #YoSoy132; estaban los electricistas, estaban los maestros, estaban representantes de la comunidad LGBT, la noche de anoche se encontraron todos otra vez, esperando el momento de la llegada de AMLO en este Zócalo en el que apenas hace seis años le cuestionaban qué seguía y Andrés Manuel les repetía que lo que que siempre seguía era no rendirse.
Cuando el reloj de la Torre Latino marcaba las 11:51 pm, y el señor de las nieves de limón terminaba felizmente su venta, la camioneta de Obrador llegó a la plancha del Zócalo, las cámaras lo siguieron hasta que le fue posible llegar al escenario. Papeles de colores volaban en el cielo y la multitud se desgañitaba para recibir a su Presidente. Todavía la gente se decía que no lo podían creer, pero estaba sucediendo. Doña Josefina de 71 años, todavía no lo podía creer. Cuando escuchó que AMLO había llegado se levantó del banquito que su familia le había llevado para que aguantara la espera y como toda una quinceañera se metió entre la multitud para estar todavía más cerca del escenario. Ella quería saludar a su nuevo presidente y ya no le dolía nada.
Carlita gritaba sobre los hombros de su papá, tiene apenas 11 años, pero ha crecido escuchando a Rodrigo, su padre, un universitario de hueso colorado, que los políticos en México son unos corruptos y que con AMLO tendríamos una esperanza de que el gobierno en verdad haga algo por su pueblo. Lucía de 14 años iba con su mamá y sus amigos, líderes del #YoSoy132 de Ecatepec, jóvenes que hace seis años eran estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras, de Contaduría, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, de la Facultad de Medicina de la UNAM, y que se habían atrevido a liderar el movimiento #YoSoy132 en el Estado de México, donde literalmente habían arriesgado el pellejo en cada uno de los municipios donde habían acudido a animar a la gente a hacer un voto informado a no dejarse comprar. La gente tenía mucho miedo entonces y no querían escucharnos -comenta Jorge-, pero sembramos la semilla y eso fue una bolita de nieve que siguió creciendo y creciendo y ahora estamos aquí y aún así no lo puedo creer.
Pero AMLO estaba en el escenario, finalmente acompañado de su esposa e hijos y, a su izquierda, una de sus más fieles colaboradoras, la nueva Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum. Los que fueron bautizados en redes sociales como Pejezombies, estaban felices, recibieron a AMLO entre aplausos y porras y el grito: “Es un honor estar con Obrador” se escuchó de manera apabullante, porque para ese entonces ya había un lleno total en el primer cuadro del Centro Histórico. La canción de Morena, el Movimiento de Regeneración Nacional, que apenas hace seis años tuvo a todos sus militantes, a sus seguidores y a los que emigraron de otros partidos en una discusión acerca de si volverse un partido o no; y siempre sí, acompañaba la llegada del nuevo Presidente de la República Mexicana.
El candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, se paró en el centro del escenario, a un lado su esposa y su hijo menor. Eran las 12 de la noche y al grito de “sí se pudo” y el ondeo de las banderas tricolor y de Morena, AMLO, con una mayoría del 53.4% agradeció el apoyo y la confianza de quienes votaron por él, desde el Zócalo de la ciudad de México, corazón político, social y cultural de nuestra República. Envió un saludo a todas y todos los mexicanos y dio su agradecimiento sincero a todos y todas los que participaron en esta jornada electoral: estudiantes, campesinos, profesionales de todas las clases sociales, de todos los sectores y de todas las religiones.
Agradeció el apoyo de millones de libres pensadores y de los dirigentes sociales y políticos que desde hace muchos años han venido luchando por el establecimiento de una auténtica, de una verdadera democracia en nuestro país. AMLO reconoció a todos aquellos precursores que estuvieron a su lado, aquellos que comenzaron esta lucha ,que ya no están entre nosotros: “No los vamos a dejar de recordar, pues ellos comenzaron esta lucha y estoy seguro que desde el cielo están celebrando este triunfo”.
Y al grito de la multitud:”justicia, justicia”, el presidente electo le respondió al pueblo de México y aseguró: “Vamos a cumplir todos los compromisos no les voy a fallar. No se van a decepcionar. Soy muy consciente de mi responsabilidad histórica, no quiero pasar a la historia como un mal presidente”.
Explicó que desde este el 2 de julio hasta mediados de septiembre va a trabajar con los miembros del nuevo gabinete para comenzar con proyectos para impulsar el desarrollo de sur a norte en el país; esto con la finalidad de arraigar a los mexicanos en sus lugares de origen.
“Vamos a trabajar respetando la autoridad constituida, nos vamos a poner de acuerdo para garantizar que en este proceso de transición el país siga su marcha sin que haya crisis de ningún tipo, se dará con armonía, de manera ordenada y pacífica”.
Anunció que se reunirá con Enrique Peña Nieto, el martes ,a las 11:00 am, en Palacio Nacional, para ponerse de acuerdo de cómo se van a llevarán a cabo los cambios desde estos últimos meses del actual gobierno. Reiteró que él y su equipo van a actuar de forma respetuosa y la transición va a ser ordenada, para que se mantenga la estabilidad económica y financiera en el país.
Comentó también que decidió nombrar a Carlos Urzúa Macías, futuro titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y a Alfonso Romo, quien será el Coordinador de la Oficina de Presidencia para trabajar el proyecto de transición económica. Y en el tema de Relaciones Internacionales empezarán a trabajar Héctor Vasconcelos, quien encabezará la Secretaría de Relaciones Exteriores y Marcelo Ebrard; para asuntos políticos internos designó a la Lic. Olga Sánchez Cordero y a Tatiana Clouthier.
Finalmente, AMLO anunció que de mediados de septiembre a finales de noviembre va a hacer una gira por toda la República como Presidente electo, porque no va a haber un divorcio -comentó- no es que ya ganamos y nosotros a gobernar y ustedes a sus asuntos, va a ser un gobierno del pueblo para el pueblo y con el pueblo.
El presidente electo se despidió asegurando una vez más al pueblo de México que no les va a fallar. “Vamos a aplicar los tres principios básicos: no mentir ,no robar y no traicionar al pueblo. ¡Viva México!” Y al grito de “no estás solo” la gente comenzó a retirarse del lugar todavía con la incredulidad de alguien que sueña por muchos años una victoria que de repente los tomó por sorpresa.
AM.MX/tiv
The post AMLO: Crónica de una victoria anunciada, pero que no nos terminamos de creer appeared first on Almomento.Mx.
Powered by WPeMatico