Eduardo Sadot
La Marina Armada de México, el Ejército, incluida la Fuerza Aérea, y ahora junto con el INE son instituciones queridas y apreciadas por el pueblo de México y al presidente Obrador como en su tiempo a Fox, los engañaron y ellos se han dejado engañar con el cuento de que el Ejército y la Marina no sirven, son elefantes blancos y muy costosos, que somos un país pacífico y no necesitamos de un ejército que nos defienda ¡por favor! Si hay instituciones respetadas y respetables son esas. A mí no me cuentan, porque asistí a conferencias de MORENA, los escuché – y conservo las grabaciones – donde insistían en la desaparición del Ejército, y la pregunta obligada es, tienen la menor idea de la importancia de lo que son, lo que hacen y, lo que significan éstas instituciones para México. Claro que no, pero basta que entiendan que Obrador como Fox se han convencido, de lo que todas las autoridades en provincia saben, que cuando algo no se puede resolver, por desastres naturales, salud, violencia, crímenes o accidentes, las Fuerzas Armadas lo resuelven.
Pues contra todos se ha metido y atacado el gobierno, con la sutil arma del presupuesto, todo apunta que por ahí demuelen a las instituciones, eso hicieron con el metro en la línea 12 y luego tratan de escurrir la responsabilidad. Sí, Sheinbaum, le quitó presupuesto al mantenimiento y luego pretende engañarnos. Me dan pena ajena, vergüenza, lo que le hacen a las fuerzas armadas, ya vieron a nuestros militares – ahora mujeres y hombres – con sus uniformes deslavados, por qué no les pasan lista con esos utensilios, sus chalecos antibalas y sus alforjas de lona, para cargadores, raídos, desgastados, deshilachados por falta de presupuesto, sin calcetines y nos preguntamos si también, sin lo demás que no se ve, perdónenme la expresión, eso es ¡no tener madre! Son sus herramientas de trabajo, con lo que protegen sus vidas y las nuestras, ellos arriesgan sus vidas no los “ninis”. Y que la tropa se encuentre en ése deplorable estado, por capricho del hombrecito de Palacio, ¡ya Basta! Eso no se vale, respete a las instituciones de México.
Qué nadie le dice, al “Comandante Supremo” que las tropas tienen hambre y necesidades para sobrevivir haciendo su trabajo, qué el comandante supremo, no se da cuenta, que las fuerzas armadas requieren de uniformes, sabe, se imagina o intuye que la delincuencia organizada trae mejores armas, mejores equipos y mejores uniformes – me refiero en lo personal de cada elemento – que los de nuestros soldados y marinos.
Revisen sus chalecos anti balas, sus fornituras de lona, sus cartucheras. Es el Ejército Mexicano, es la Marina Armada de México, es – dice que también son pueblo – pues es el pueblo mexicano, nada más, que ésa parte de él que arriesga su vida diariamente por usted por mi, por nosotros por todos, y no se vale que les paguen y equipen con cacahuates.
La próxima vez – que usted amable lector – coincida con algún miembro de las fuerzas armadas en alguna tienda, démosles una muestra de gratitud, nada nos cuesta pagarles su cuenta, que además no pasa de chocolates y refresco y nada nos quita, demostrarles así nuestra gratitud, mientras el gobierno de la 4T los humilla.
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