Francisco Gómez Maza
• Pero un pan sin gluten, hace un mes, 98 pesos; hoy, 188
• Y eso que el Banxico cumple religiosamente con su papel
Contraer o expandir, palabras clave de la política monetaria que, por mandato, aplica el Banco de México en la economía nacional:
Y la razón: Intento por fortalecer y mantener fuerte la inmunidad de la economía del país frente a la inflación. Controlar el comportamiento de los precios de los bienes y servicios producidos por el aparato económico es la tarea fundamental de todo banco central en el mundo.
Porque la inflación es el cáncer que corroe de manera brutal todo el cuerpo social y debilita la ya de por sí debilitada capacidad de las mayorías pobres de sobrevivir dignamente en esta tierra:
En la semana que terminó el 26 de agosto, el Banco de México realizó operaciones de mercado abierto con instituciones bancarias, para compensar una expansión neta de la liquidez, por 45 mil 043 millones de pesos. Estos pesos eran como un estorbo para la buena marcha de los precios, digamos en términos populacheros.
Esta expansión de la liquidez (por supuesto, inflacionaria) fue resultado de: El retiro de recursos de la cuenta de la Tesorería de la Federación y otras operaciones por 24 mil 773 millones de pesos. En segundo, la menor demanda de billetes y monedas por parte del público, por 20 mil 270 millones de pesos.
La base monetaria (billetes y monedas en circulación y depósitos bancarios en cuenta corriente en el Banco de México) disminuyó 20 mil 270 millones de pesos, alcanzando un saldo de 2 billones 460 mil 907 millones de pesos, cantidad que implicó una variación anual de 13.4%.
(El nivel y el comportamiento de la base monetaria refleja en parte las medidas sanitarias implementadas en el país para la contención de la pandemia de COVID-19, así como la persistencia de un efecto precautorio derivado de la misma, que habrían afectado la demanda de efectivo por parte del público como medio de pago. Adicionalmente, el crecimiento de la base monetaria se ha visto afectado por la dinámica de la inflación.)
Las reservas internacionales del Banco de México, por otro lado, también se contrajeron. Al 26 de agosto, el saldo de la reserva internacional fue de 198 mil 761 millones de dólares, hecho que significó una reducción semanal de 242 millones de dólares y una disminución acumulada, respecto al cierre de 2021, de 3 mil 638 millones de dólares.
En otras entregas de Análisis a Fondo, se ha informado, para quienes no estamos familiarizados con la ciencia económica, que las Operaciones de mercado abierto son aquellas que tienen lugar en el mercado de dinero a iniciativa del Banco Central, para contraer o expandir la oferta de dinero. Con el propósito final de controlar la inflación.
El Banco de México interviene en el mercado de dinero mediante subastas para ofrecer crédito o recibir depósitos y, a través de la compra o venta de títulos gubernamentales, ya sea en directo o mediante reportos. Ésta es otra manera de batallar contra la inflación.
Debe usted saber que el Instituto Bancario Central tiene, además, por norma general, ajustar diariamente la oferta de dinero primario, a través del manejo de su crédito interno neto, de forma tal que corresponda a la demanda de base. Nadie puede gastar lo que no tiene. Años ha que los gobiernos imprimían billetes más allá del soporte del mercado. Pero esa práctica era la más eficiente causa del aumento de los precios en la economía.
Así, controlando el monto del dinero en relación con el valor de la producción, las autoridades monetarias intentan controlar la carrera de los precios, fenómeno que nos lleva a la inflación.
Otra arma que debería de ser letal para la inflación es el manejo del costo del dinero. Es una de las tácticas para controlar la inflación. Incrementar la tasa de interés por el crédito y el ahorro bancario. Pero obstaculizar la marcha de la economía tarde o temprano lleva a la recesión y entonces estaríamos fritos.
Recuerde que la inflación a la economía -popular, sobre todo- es como el cáncer al cuerpo físico. Destruye la capacidad de vivir como seres humanos de los pobres. Y puede ser tan sediciosa como los grupos radicales, extremistas de izquierda y de derecha.
La inflación, en economía, es el aumento generalizado y sostenido de los precios de los bienes y servicios existentes en el mercado, durante un período de tiempo, generalmente un año. Y es el impuesto más oneroso, destructor, para las mayorías de pobres que, más o menos, suman unos 55 millones de personas en México, en base a los cálculos del Coneval.
Muchos pobres, ¿no le parece? Y pobres no porque sean haraganes, sino porque son víctimas de la explotación de la mano de obra. Entre otras razones.
Pero nos queda la pregunta de los 64 mil pesos:
¿Por qué si las autoridades monetarias hacen todo lo que ordena el vademécum para combatir la inflación, ésta sigue y sigue aumentando?
Algo le falla a la política monetaria. O las leyes de la economía simplemente no funcionan. O hay algo más emocional que obliga a la oferta a ganar más de la cuenta por un producto o servicio.
Les doy un ejemplo:
Ivonne compró hace un mes exactamente un pan bimbo sin gluten, con semillas de chía y linaza, de 430 gramos, en 98 pesos.
No pasaron 30 días. Hoy le costó 188 pesos en cualquier almacén de los llamados de autoservicio.
¿Usted cree?
¿La inflación es producto de qué, entonces?
Aquí hay, inclusive, un delito penal de lo que los mexicanos llaman “robo en despoblado”. ¿O no, amigos neoliberales?