Francisco Gómez Maza
• Es tan efímero que el papel impreso sirve para todo
• Se usa también para limpiar la caca y los orines del perro
Señores periodistas que, para descansar de tanto trabajo, participan en las llamadas redes sociales que en realidad son antisociales, no se enojen con la pobrecita Chayo. Ella dijo en Ciudad Juárez, a donde fue a pasear, que los periódicos sirven para matar moscas y limpiar vidrios.
Y es que su amigazo del alma, César Duarte Jáquez, albo e impoluto gobernador saliente de Chihuahua, es acusado en las planas de los periódicos de corrupto, de enriquecimiento ilícito y de endeudar al estado con un pasivo de 50,000.000,000 de pesos. Pobre hombre. Pero ni tan pobre, porque la defensa que hace de él doña Rosario equivale a la plena defensa de su conducta por el presidente de la república.
Pero volviendo a que los periódicos sirven para matar moscas y limpiar vidrios, también sirven para otras cosas: para envolver tomates, para envolver flores, para limpiar la caca y el orín de los perritos malcriados en la sala de la casa, para cubrir carrocerías cuando se van a repintar, y no sirven para limpiarse el culo porque la tinta de las malas noticias mancha el ano.
Ah, y hablando de las malas noticias y las buenas noticias a las que recientemente se refirió el propio señor presidente, yo tengo mi particular convicción académica acerca de la moralidad, inmoralidad y amoralidad de las noticias.
Para mí, que cuento exactamente 51 años de reportero, en Excélsior, en Proceso y en el Financiero, cuando este especializado en finanzas era de los Cárdenas, en el mundo el reportero no va detrás ni de las malas ni de las buenas. No hay ni buenas ni malas noticias. Hay noticias, así, sin calificativos.
Lo que ocurre es que, como se supone que la prensa es el Cuarto Poder (Bueno. Eso dicen. Depende de quién lo dice, si el perínclito Joaquín López Dóriga, el reportero de todos los presidentes de Luis Echeverría para acá, o la señora Carmen Aristegui, especialista en denunciar las conductas del presidente y su colaborador más importante, el que maneja el billete, don Luis Videgaray. O lo dice un periodista de a pie, que trabaja para la gran prensa como pueden ser El Universal, La Jornada o el Reforma, que también sirven para limpiar vidrios, matar moscas y para todo lo que a usted se le ocurra o necesite, incluso, aunque la tinta manche, como papel no tan higiénico.
La prensa fue inventada para eso, doña Rosario. Para limpiar vidrios y matar moscas. Porque hay unos vidrios muy cochinos en las lujuriosas residencias de los miembros de la clase política y en el aparato burocrático hay muchas moscas porque en él parecen grandes letrinas, horrorosos estercoleros que hieden y no a ámbar, como dijo el señor Quijano a su amigo Sancho. Y uno de los papeles de los periódicos es denunciar al raterío que hace nido en la estructura gubernamental. Después de que aparece la denuncia ya puede usted usar el periódico para lo que le plazca, señora.
Y su papel, señora, no es de abogado defensor. No tiene por qué salir en defensa de César Duarte Jáquez. Usted sólo es aprendiz de todo y oficial de nada. César Duarte Jáquez puede defenderse sólo, no la necesita a usted. Si es ladrón va aparecer en las revisiones que de las cuentas del gobierno chihuahuense realice la ASF organismo fiscalizador de la Cámara de Diputados. Ahí se verá si es honesto o es ladrón. Y entonces ya podrá usted, doña Rosario, limpiar los vidrios de sus lentes o matar las moscas que debe de haber seguramente por donde anda usted dando limosnas a los pobres.
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