DIARIO DE ANTHONY
Son las 10: 31 de la mañana, y te escribo sobre una hoja virtual. Y no sé qué decirte. Reviso mi diario y me doy cuenta de “lo dramático” que soy. Pero nada es drama, todo es dolor. Este es el pu… problema. Hoy por ejemplo, de nuevo me sucedió. El dolor me atacó. Anoche sentía lo mismo… en ciertas partes de mi cabeza. Pero entonces decidí tomarme una pastilla de Loratadina… Ah; ¡mi cabeza está INFLAMADA! Así que es normal todo lo que me sucede. ¡Maldita sea! Le tengo mucho miedo al dolor… a la presión que luego luego me vuelve a aparecer.
Es difícil de explicarlo. Hace apenas unos instantes que sentía no poder moverme. Me humecté la nariz, una y otra vez, con la solución casera que yo hice. Sólo expulsé cantidades pequeñas de mocos, pero esto no me alivió. Luego decidí sentarme. Entonces me empecé a masajear y a masajear la parte que me dolía: el lado derecho de la cabeza. La tumefacción no se deshacía… Me sentía muy preocupado… Ayer es que me había puesto los corticoides, así que no podía ponérmelos otra vez ahora, a pesar de que ya habían pasado más de 12 horas… Seguí masajeándome el área donde dolía, ¡hasta que finalmente el dolor se deshizo! Entonces nuevamente me sentí un poco mejor.
¡Mierda! Ahora, al estar frente a la pantalla, ya no sé qué decir. Porque ya no quiero SONAR PRETENCIOSO, pero la puta verdad es que SOY UN LUCHADOR… ¡De verdad! Y no quiero relatarlo, pero, maldita sea; ¡estoy haciendo lo que debo!
Y supongo que ayer ha sido un día esplendoroso. Es decir que he vendido algunas 3 copias de mis cuentos a las personas que siempre muy amablemente reciben mis nuevos trabajos, sin chistar… Les he leído a los niños de una escuela, la historia de panucho y salbut, etcétera.
En la mañana, creo que reuní 50 pesos, con las ventas de las copias. En la tarde, afortunadamente, logré hacer 30 pesos más, con las copias que “les vendí” a dos profesores más… Me sentía RARO… Gota por gota iba cayendo “la ayuda” en mí… y se sentía maravilloso. Gota por gota sentía que al menos ESTABA YO HACIENDO ALGO… Eran tres las hojas Un cuento (Muerte de un Presumido), un poema (Dear End), y el otro cuento (Un ser extraño y solitario), y por cada una pedía 5 PESOS. Así que, 3 x 5= 15.
Aparte de los cincuenta pesotes que gané limpiando aquel salón de clases. Pero toda esta cantidad se la di a mi madre para la comida. Así que… Aquí estoy. Solamente go on and on… Hace poco pensaba que, si ya hay premios pendejos como “El Nobel de la Paz, de Literatura, y no sé qué más, pues entonces que ya debían de inventar EL NOBEL PARA LUCHADORES, pero no de esos pendejos que usan mascara y todo, no, sino que para personas que como yo HAN LUCHADO MUCHO. Pero en fin. No quiero sonar pretencioso, y mucho menos presuntuoso. Es solo una idea u opinión.
Con el dinero del premio, no sé; creo que le construiría una casa a mi madre, me compraría CAJAS ENTERAS DE STERIMAR (que ahora no tengo, y no sé cuándo pueda conseguir dinero para comprarlo), etcétera, etcétera.
Estoy un poco más tranquilo, aunque con el temor de que al moverme el dolor me golpee otra vez… Hoy es hoy, y mañana será ayer… Ayer es hoy, y hoy es pasado… Así que a seguir, tratando de no pensar en todo lo perdido… Hoy es hoy, así que sé que mañana he de estar un poco más lejos del día de hoy…
A. SMART
Mayo/17/2018