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pavesoberanes
- Presidenta de los Mexicanos en el Extranjero
El líder de izquierda más importante de la región, el candidato más votado de la historia, el presidente más popular de México, el jefe de Estado número dos en el mundo, Andrés Manuel López Obrador, ganó las presidenciales de 2024 a través de Claudia Sheinbaum.
En su primer discurso a la República anunció que Ramírez de la O será secretario de Hacienda y que en septiembre será reformada la Constitución para refundar el poder Judicial, que para eso sirve la mayoría calificada del poder Legislativo.
Luego vino la caída del Mercado Bursátil, la depreciación del súper peso y los focos de alarma de emisores e inversores, los barones del dinero mordiéndose las uñas, que todo junto cimbró las estructuras de un nuevo gobierno nacional que, aún no tomando asiento en Palacio Nacional, en cuatro días se hizo viejo.
La votación histórica, con todo y narrativa de elección de Estado y de fraude electoral, trajo mensajes de perpetuidad del poder-Maximato: 1. Revisar el presidente saliente y la presidenta entrante, la reforma del poder Judicial que trastocaría la actual composición de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; 2. Designar dualmente al ministro del Tesoro Público, para tranquilizar los mercados —lo que no logró— y que el súper peso lo vuelva a ser, desaparecer a la Comisión Federal de Competencia Económica y al Instituto Federal de Telecomunicaciones, amparos por el acuerdo tripartito del T-MEC; 3. Ayudar a que los padres de los 43 tengan comunicación con la nueva presidenta de la República y otras acciones propias de la borrachera triunfalista por el anuncio irresponsable —y falso— de mayoría calificada en San Lázaro.
El gobierno del líder de izquierda más importante de la región, del candidato más votado de la historia, del presidente más popular de México, el jefe de Estado número dos en el mundo, Andrés Manuel López Obrador, no calculó los afectos de discursos y comportamientos gubernativos, y provocó un maremoto en tierra firme.
La borrachera cuatroteísta y el síndrome de supresión opositora, provocaron que el arbitraje electoral anunciara la revisión de 102 mil 388 casillas —«voto por voto, casilla por casilla», mantra transexenal lopezobradorista—, de 170 mil instaladas, para dar tranquilidad a las reacciones del carro completo morenista que subió el dólar y paró los mercados, alimentados por una narrativa de fraude.
Las oposiciones tienen las pruebas en la mano, es decir, copias de las actas de todas las casillas, con lo cual podrían desvelar el amaño en la contabilidad de sufragios, si lo hay, pero no lo hacen. Los dirigentes de los partidos de oposición saben que ganan perdiendo. En la coyuntura política-electoral-gubernamental-hacendaria-bursátil, exhibida la novatez del nuevo gobierno viejo, el diario El País llamó a las oposiciones a no seguir anunciando el fin del mundo, si no dicen cuando ni cómo.
letraschiquitas
La senadora Xóchitl Gálvez regresa hoy a su escaño —se anuncia una bienvenida—, con un nombramiento especial: presidenta de todos los mexicanos en el extranjero, al ganar [15,375] las votaciones a Claudia Sheinbaum [12,584]***. Aún cerrado el programa de resultados preliminares y a horas de expedir la constancia de mayoría a la ganadora Margarita González, la licenciada senadora de MORENA, Lucía Virginia Meza, anunció revisión de votos y casillas. Quiere perder dos veces***. No podría ser de otra forma: los partidos parásitos PES de Hugo Éric Flores, RSP de Elba Esther Gordillo, MAS de César Camacho–Matías Nazario y Morelos Progresa de Graco Ramírez, perdieron su registro.