Lilia Arellano
“La televisión se nos aparece como algo semejante a la Energía nuclear. Ambas solo pueden canalizarse a base de Claras decisiones culturales y morales”: Umberto Eco
• Cierran la llave a los abusos publicitarios
• INE; medirá audiencias; INAI será el vigilante
• Presupuesto recortado y uso de tiempos oficiales
Noviembre 2, 2018.- La iniciativa con la cual se pretende poner fin a la corrupción y a la impunidad presidencial, con todo y puente de difuntos, ha levantado ámpula, sin embargo, ésta ha sido superada al contar los diputados con el texto con el cual se pretende poner fin a la denominada “Ley Chayote”, en extremo protectora de los intereses, principalmente, de las dos cadenas televisivas y por lo menos otro par de radiofónicas. Es de esperarse que, al verse reducido el presupuesto a solamente el 0.005 por ciento, es decir la quinta parte de los recursos utilizados por Enrique Peña Nieto, los editores se unan a los monopolios y utilicen todos los medios a su alcance para ejercer presión sobre el gobierno entrante.
El documento próximo para discutirse, contempla once puntos principales: el primero de ellos pretende regular la planeación, uso y asignación n de la publicidad oficial, misma que deberá ser respetada por los tres niveles de gobierno y en todas las entidades gubernamentales. Obliga a ambas partes, a los medios y al gobierno, a rendir cuentas y transparentar el uso de los recursos. Prohíbe el uso propagandístico. Se sanciona a quien use la publicidad oficial para censurar, castigar o premiar a los propios medios de comunicación.
Establecen criterios sanos y firmes para las asignaciones. Se establecen topes en los cuales se contempla un 10 por ciento de lo autorizado para los sobre ejercicios. Le otorga sal INEGI la facultad de las mediciones de audiencia con lo cual queda eliminado el uso faccioso de éstas. Será el INAI la institución encartada de vigilar planeación, uso y asignación publicitaria. A través de un fondo se fomentará investigación y capacitación de periodistas. Con ello se pretende el establecimiento de mecanismos e instrumentos de planeación y evaluación sustentados en la transparencia de la ejecución y el manejo de los recursos públicos destinados a este renglón.
El amplísimo texto elaborado por MORENA y a presentar como iniciativa de Ley por Pablo Gómez, advierte entre muchos otros renglones: “Tiene por objeto normar la difusión de propaganda que realizan los entes públicos regulados; el uso de los tiempos que corresponden al Estado en radio y televisión; la programación, ejercicio y evaluación de los recursos presupuestales destinados al gasto en propaganda de los entes públicos federales; y disponer el régimen de sanciones aplicables por el incumplimiento de las disposiciones legales en la materia, con el fin de: Garantizar su carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social; Evitar y sancionar la promoción personalizada de servidores públicos; Preservar los principios de imparcialidad y equidad en la competencia política; y. Garantizar el derecho a la información y la libre manifestación de las ideas, así como la libertad de difundir opiniones, información e ideas.
“Además, se pretende que la difusión de propaganda oficial en radio y televisión sólo pueda realizarse por los entes públicos haciendo uso de los tiempos oficiales, con excepción de la contratación de tiempos para carteleras culturales y de espectáculos, campañas de salud, información de prevención civil frente a siniestros u otros casos de emergencia o la relativa a las prevenciones generales emitidas en función de una situación extraordinaria decretada por el Congreso, y se establece una restricción para la realización de ampliaciones o traspasos presupuestales y otras reglas especiales de financiamiento en el rubro de publicidad. La distribución de recursos se propone: 35 por ciento para el Poder Ejecutivo federal; 10 por ciento para el Poder Legislativo federal, tiempos que se distribuyen en partes iguales entre la Cámara de Diputados y el Senado de la República; 10 por ciento para el Poder Judicial de la Federación; 10 por ciento para los organismos públicos autónomos federales; 35 por ciento para las entidades federativas”.
Se extiende esta propuesta de ley a: “Los servicios de información, producción, contratación y distribución de contenidos en radio y televisión, redes públicas de telecomunicaciones, así como prensa escrita, plataformas digitales y, en general, cualquier forma de difusión masiva o selectiva de información que se realice por señal abierta o restringida, así como a través de las redes públicas de telecomunicaciones, franquicias postales, plataformas digitales, publicidad exterior, publicidad digital personalizada o en forma impresa o cinematográfica, mediante textos, sonidos o imágenes, destinada al público, cualquiera que sea el soporte o instrumento utilizado.
“A efecto de evitar todo acto de censura indirecta, discriminación o privilegio de personas determinadas, la adquisición de servicios de empresas privadas de publicidad o medios de comunicación social observa las siguientes disposiciones: No se contrata con una sola empresa, grupo o medio de comunicación adquisiciones cuyo costo total sea mayor al 25 por ciento del gasto total destinado para cada tipo de servicio de comunicación social; No se concentra en un solo servicio de comunicación social más del 50 por ciento del gasto total destinado a cubrir la propaganda; No se establecen criterios de contratación directa o indirectamente relacionados con la línea editorial o, en general, la opinión de los medios de comunicación; No se contratan servicios que incluyan como servicios adicionales la emisión de noticias, infomerciales, gacetillas o mensajes semejantes”
El seguimiento de todo lo marcado en las 21 cuartillas de la iniciativa, será responsabilidad de la Secretaría de Gobernación. Ya se verá hasta donde estarán dispuestos a cortar de tajo el abuso cometido por muchos políticos empeñados en ascender a base de la utilización mediática y no por las acciones emprendidas y de quienes, con el traje de empresarios, no de comunicados se dieron el lujo, en el pasado reciente, de sentirse hacedores de presidentes, el último ejemplo se tiene en EPN y su destape anticipado, cuando apenas cumplía un año como gobernador del Estado de México, propaganda sostenida y difundida por López Dóriga y con seguimiento hasta en los programas de cocina del llamado “canal de las estrellas”. De pasadita habrá un freno real para las reelecciones bajo imposición.
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