Durante el foro “Mitos y realidades del vapeo: ¿hacia dónde debe ir México?”, organizado por la senadora de Morena, Eva Galaz Caletti, legisladores se pronunciaron por regular la venta y consumo de vapeadores y cigarros electrónicos para desaparecer el mercado negro de esos dispositivos y evitar el consumo de los menores de edad.
En su intervención, Galaz Caletti indicó que de acuerdo con cifras de la última Encuesta Nacional sobre el Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco, en el país hay cerca de 15 millones de fumadores de entre 12 y 65 años y al menos 10 por ciento de los menores de edad han usado alguna vez un producto alternativo al cigarro, cifras que consideró “alarmantes” y “escandalosas”.
“Por lo tanto, debemos preguntarnos: ¿qué nos conviene más como sociedad, prohibir o regular los dispositivos electrónicos?”, señaló al argumentar que es importante que los legisladores se cuestionen la necesidad de una regulación para los vapeadores debido a la relevancia que han tomado estos productos en los últimos años y que cada vez más jóvenes acceden a ellos mediante el mercado negro y hasta en máquinas expendedoras.
“Quitemos de las manos del crimen organizado no sólo las ganancias, sino la salud de nuestros niños y jóvenes, principalmente consumidores de dispositivos que ni siquiera sabemos qué sustancias contienen y que se pueden encontrar hasta en máquinas expendedoras de centros comerciales”, agregó la senadora.
Señaló que esta prohibición es promovida por el sector Salud y por organizaciones regionales, quienes se niegan a sostener un debate objetivo si no es con ponentes autorizados por ellos, y en ese sentido, pidió a los funcionarios que dejen a un lado la intolerancia y les recordó que ningún convenio debe pasar por encima de la salud y derechos humanos de los mexicanos.
“Desde esta soberanía les hacemos un respetuoso recordatorio: ningún convenio, por marco que sea, está por encima de los derechos humanos. Le pedimos a los funcionarios que dejen a un lado la intolerancia y la cerrazón. Trabajemos de la mano para desaparecer al mercado negro de esos dispositivos, el cual se estima que genera entre 3 y 5 mil millones de pesos anuales, sólo en México”, aseguró.
En el foro, también estuvieron presentes organizaciones de la sociedad civil, comunidad médica, así como expertos en el tema como el profesor Peter Hajek, del Queen Mary University of London, quien aseguró que existen pruebas sólidas de que los vapeadores son mucho menos perjudiciales que los cigarros convencionales.
“Diversos estudios del Public Health England y del Royal College of Physicians concluyeron que es poco probable que los riesgos de los vapeadores superen el cinco por ciento de los riesgos del tabaquismo”, explicó durante su participación.
Igualmente resaltó que los estudios de la Office for Health Improvement and Disparities (Oficina para la Mejora de la Salud y las Disparidades) concluyeron que el vapeo sólo supone una pequeña fracción de los riesgos que supone el consumo del cigarro.
Asimismo, desmintió que el vapeo sea la puerta de entrada al tabaquismo para los jóvenes ya que replicó que los países que han regulado las alternativas al cigarro, tal es el caso de Reino Unido, Nueva Zelanda y Estados Unidos, han demostrado que la mayoría de los jóvenes que probaron estos dispositivos ya fumaban previamente.
“La epidemia de adicción a la nicotina entre los jóvenes en Estados Unidos no existe, ya que el 28 por ciento de los estudiantes de secundaria que consumieron cigarrillos electrónicos en los últimos 30 días, pero casi todos con antecedentes de consumo de tabaco. Menos del 0.2 por ciento de los jóvenes nuevos con el tabaco muestran algún signo de dependencia de la nicotina”, comentó.
El profesor hizo un llamado a los organismos reguladores mexicanos, “presionados para actuar contra los cigarrillos electrónicos”, que consideren el enfoque de Reino Unido en sus políticas regulatorias de estos dispositivos: “Mientras los cigarros sigan estando disponibles, prohibir alternativas más seguras o hacerlas caras y poco atractivas no es racional y probablemente perjudique la salud pública”, dijo.
Por último mencionó que el objetivo de la regulación del control del tabaco es detener el cáncer, las enfermedades cardíacas y las enfermedades pulmonares causadas por el tabaquismo.
En redes sociales los usuarios también se unieron a la conversación en Twitter con el hashtag #RegulaciónNoProhibición y de acuerdo a una medición realizada por MW Group, estuvo en el séptimo lugar de tendencias en México, el cual tuvo un alcance de 175 mil 324 personas, así como mil 743 menciones.
Los internautas señalan que el Gobierno federal prefiere abrir las puertas al mercado ilegal de estos dispositivos, poner en riesgo a los ciudadanos y a los jóvenes con productos de mala calidad y privar a los consumidores adultos de una opción menos riesgosa para disminuir su consumo de nicotina o dejarlo definitivamente.
Al mismo tiempo, pidieron a las autoridades sostener un debate objetivo con organizaciones, expertos y legisladores y tomar en cuenta los estudios que demuestran los beneficios de los vapeadores, para que se impulse una regulación estricta e inteligente que es urgente para frenar los daños del tabaquismo en la salud de los mexicanos.