Colombia pidió el jueves ayuda internacional mientras luchaba contra decenas de incendios forestales que quemaban amplias zonas del país y cubrían la capital con un manto de humo.
Mientras cientos de bomberos y voluntarios luchaban contra las llamas en las montañas alrededor de Bogotá por cuarto día consecutivo, las escuelas y una universidad en las zonas más afectadas cancelaron las clases presenciales y decenas de vuelos desde el aeropuerto internacional El Dorado fueron retrasados o cancelados debido a las malas condiciones. visibilidad.
En las últimas semanas ya se han extinguido cientos de incendios en todo el país en medio de temperaturas récord y condiciones secas relacionadas con el fenómeno climático de El Niño.
Más de 6.600 hectáreas (16.300 acres) de vegetación han sido destruidas hasta el momento, según la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Treinta y un incendios seguían arrasando el jueves en cinco regiones de Colombia, al menos tres de ellos alrededor de Bogotá.
El presidente Gustavo Petro dijo que ordenó «activar protocolos de ayuda internacional» y anunció que ya han llegado ofertas de ayuda de Estados Unidos, Chile, Perú y Canadá.
El presidente ha declarado un desastre natural, lo que permite desviar fondos de otras partidas presupuestarias para contener los incendios.
En los departamentos de Santander y Cundinamarca, de los cuales Bogotá es la capital, los incendios han consumido unas 600 hectáreas de bosque, dijeron las autoridades.
Las autoridades han advertido sobre un «deterioro significativo» en la calidad del aire en la ciudad de unos ocho millones de habitantes, y desaconsejan a los bogotanos la actividad física al aire libre.
Se vio a muchos peatones con mascarillas.
«Estoy muy preocupada… ¡Dios mío! Es terrible», dijo a la AFP la residente Andrea Gómez, de 48 años.
El ayuntamiento aconsejó a los ciudadanos cerrar las ventanas y dejar toallas mojadas debajo de las puertas, y el alcalde Carlos Fernando Galán dijo que estaba en contacto con el embajador español para una posible ayuda ya que la situación «puede volverse más crítica».
Cientos de animales salvajes, incluidos animales parecidos a mapaches llamados coatíes, puercoespines, pájaros y ranas, han estado huyendo del calor y las llamas en uno de los países con mayor biodiversidad del mundo, y se han visto en cantidades cada vez mayores en zonas urbanizadas.
Los ciudadanos se han movilizado para llevar bocadillos y bebidas a los bomberos y han compartido llamamientos en las redes sociales para dejar fuera el agua para los animales en peligro.
‘El año más caluroso’
Imágenes compartidas por la Autoridad de Aviación Civil de Colombia mostraron una densa nube de humo blanco que envolvía la torre de control de El Dorado, donde funcionarios del aeropuerto dijeron que el jueves se cancelaron 48 vuelos, 16 se desviaron a otros aeropuertos y muchos otros se retrasaron.
Petro dijo que el calentamiento global estaba agravando los efectos de El Niño, un fenómeno típicamente asociado con el aumento de las temperaturas en todo el mundo, sequías en algunas partes del mundo y fuertes lluvias en otras.
«Este puede ser el año más caluroso de la historia de la humanidad», afirmó el presidente, llamando a «cada alcalde, cada gobernador y el gobierno nacional» a priorizar el suministro de agua.
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