Historias para armar la Historia
Ramsés Ancira
Tony Blair, ex ministro de Gran Bretaña; José María Aznar, ex presidente de España y George Bush Jr. forman el triángulo de asesinos seriales que provocó la guerra en Irak, con un saldo inicial de 4 mil soldados estadounidenses muertos; el primero de ellos un joven de origen mexicano, Jesús Alberto Suarez del Solar Navarro. Esto es una pequeña parte de la historia que engrandece al presidente Andrés Manuel López Obrador por su decisión de ofrecer asilo diplomático al periodista Julián Assange, creador de WikiLeaks.
Estos tres genocidas, también están detrás del presunto asesinato del mexicano Adolfo Aguilar Zinser, quien fue nuestro representante en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Así se dimensiona aún más el valor internacional de la marca López Obrador
Son muchos ángulos y momentos históricos que necesitan ser conectados para una mejor comprensión de la trascendencia que tiene la decisión del presidente de México, al refrendar el derecho de asilo. Esta práctica tuvo su cumbre en el periodo presidencial de Lázaro Cárdenas, cuando se salvaron cientos de vidas de republicanos españoles y personas de origen judío, perseguidos por el fascismo y por el nazismo, y quienes son ancestros de miles de nuestros compatriotas contemporáneos.
Jesús Alberto Suárez del Solar, fue el primer soldado de origen mexicano, y el quinto hispano muerto en la Invasión a Irak, el 27 de marzo del 2003.
Casi un año después, el 11 de marzo de 2004, la “cortesía” que tuvo el presidente español José María Aznar con el presidente Bush Jr., le costó al país ibérico una serie de ataques en cuatro trenes de Madrid. Diez de trece artefactos estallaron, lo que provocó un saldo de 193 españoles muertos y alrededor de 2 mil heridos graves. Esto se convirtió en el mayor atentado en la historia de España.
A la fecha Aznar no ha sido juzgado como provocador de estos actos terroristas.
El 12 de julio de 2007, tras recibir el permiso solicitado, con la frase “fríelos a todos”, el piloto de un helicóptero Apache ametralló a un grupo de civiles, entre los que se encontraban dos fotoperiodistas de la Agencia Reuters. Uno de ellos, Saeed Cmagh, sobrevivió al fuego de artillería desde el aire, pero luego fue asesinado por soldados que le dispararon desde tierra.
Una niña y un niño que se encontraban en una camioneta resultaron heridos. Ella no podía ni siquiera parpadear debido a los cristales de las ventanas que le cayeron en los ojos. Un soldado de Estados Unidos quiso llevarla a un hospital, pero sus superiores se lo impidieron.
El 5 de abril de 2010, el sitio WikiLeaks, dirigido por Julián Assange publicó en una conferencia a la que acudieron diversos medios de comunicación, el video titulado Collateral Murder (Asesinato colateral), donde demostró la forma en que ocurrieron los crímenes de 2007.
El video incluye la conversación por radio entre el piloto del helicóptero Apache, identificado como “Caballo Loco” y las fuerzas en tierra. Puede ser visto en la Wikipedia en este enlace.
El gobierno de Estados Unidos alegó que todo fue una lamentable confusión pues el piloto del helicóptero pensó que las cámaras de los periodistas eran armas. Sin embargo, aún a la fecha, el poder judicial de esta nación de Norteamérica, solicita que Julián Assange les sea entregado para juzgarlo por espionaje y condenarlo a 160 años de prisión. Esta es la injusticia que quiere evitar López Obrador trayéndole a México, lo que le ha permitido ocupar los titulares de periódicos británicos como The Independent.
El caso es de trascendencia mundial porque pone a discusión la enorme diferencia que existe entre la obligación de todo ciudadano de servir al Estado (integrado por el territorio, la población y los funcionarios democráticamente electos, de acuerdo a la definición de la Constitución Mexicana) o ser sujetos a los caprichos de un gobierno.
Katharine Gun es una lingüista nacida en 1978. Ella trabajaba para el Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno Británico, GCHQ por sus siglas en inglés, cuando descubrió que los representantes del Consejo de Seguridad de la ONU que se oponían a la invasión de Irak, eran investigados para encontrar la forma de chantajearlos. Uno de ellos era el mexicano Adolfo Aguilar Zinser.
Él entendía que su responsabilidad en la ONU era con México y no con el presidente Vicente Fox, a quien advirtió que Estados Unidos seguía considerando que nuestro país era su traspatio.
Por su parte Gun filtró esta información y la hizo llegar al periódico británico The Observer, que hasta entonces se pronunciaba por la guerra. Sin embargo, el reportero Martin Derek Bright encabezó a un equipo de periodistas que investigó los hechos y concluyó que eran ciertos: el primer ministro Tony Blair tenía toda la información, pese a lo cual persistió en callarla para que, con el pretexto de que Sadam Hussein tenía armas químicas, se pudiera declarar la guerra.
Aguilar Zinser se apoyó en los científicos mexicanos de la UNAM, Benjamín Ruiz Loyola y José Luis González Chávez quienes formaban parte de un equipo internacional que concluyó que en Irak no existían tales armas químicas, pese a lo cual la guerra inició, dando como primer saldo un millón de civiles muertos o mutilados, muchos de los cuales eran niños.
La fiscalía del Reino Unido decidió retirar los cargos contra Katharine Gun porque esto hubiera supuesto que en un juicio público se ventilaran las trampas de Blair. Al quedar en libertad, tras un año de intensas presiones por la amenaza de que la juzgaran responsable de delitos equiparables a “Traición a la Patria” la profesionista declaró que su intención fue salvar la vida de británicos llevados a una guerra injusta. “Lo haría otra vez” declaró al salir de la Corte.
El diplomático, escritor y político mexicano independiente Aguilar Zinser murió en un improbable “accidente” el 5 de junio de 2005, cinco años antes de que WikiLeaks develara el complot perpetrado por Aznar, Blair y Bush.
José María Aznar, además de tener responsabilidad en los crímenes de guerra cometidos en Irak, es investigado porque en esos años (2000 a 2004) distrajo a la opinión pública para adjudicar contratos por casi 600 millones de euros, en beneficio propio y del Partido Popular.
Tampoco Tony Blair está en la cárcel, en lugar de eso fundó un instituto que asesora a gobiernos sobre la forma de cometer fraudes. Se llama Institute GC y tiene como lema “Helping leaders & governments to deliver for their people” cuya traducción según Google sería Ayudando a los líderes y gobiernos a cumplir con su gente, pero que más literalmente podría interpretarse como “Ayudando a líderes y gobiernos a despacharse con su gente”
Algunos analistas han considerado que López Obrador podría ganarse enemigos en Estados Unidos y Gran Bretaña por darle asilo a Assange, cuyo único delito fue desenmascarar a verdaderos terroristas que se cubrían con el cargo de jefes de Estado.
Quienes hoy denostan por placer al presidente mexicano, podrían compararlo con la triada criminal integrada por Aznar, Blair y Bush.
Bitácora complementaria
Morena podría ser destruido por un enemigo muy poderoso: Morena
Esto ante la opacidad de Mario Delgado, presidente del Partido, para regalar candidaturas basadas en encuestas cuyos resultados, metodología y segundos, terceros y cuartos lugares nadie conoce, acaso porque no existen tales encuestas…
…y todavía faltan las de diputados de mayoría relativa y de representación proporcional.