La Secretaría de Economía federal publicó un decreto que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2020.
Redacción NoticiasMX.- Calificado como “populista” o con clares tintes de “clientelismo electoral”, la publicación del nuevo Decreto que regula la importación definitiva de vehículos usados provenientes de Estados Unidos y Canadá en el Diario Oficial de la Federación (DOF), motiva a una nueva discusión en la agenda pública nacional.
Y no es la caída de entre un 9 y un 12% en promedio de los autos nuevos, según la queja de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, que desde luego incide en el llamado “Riesgo-país”, como indicador financiero, pues incide que uno de los motores de nuestra economía, como lo es el sector de la manufactura automotriz, no sea lo suficientemente respaldada por el consumo interno.
Pero básicamente, la problemática parte del tema del deplorable hecho de que nos convertiremos, ahora sí deliberadamente, en el “yonque de chatarra vehicular más grande del mundo”.
Desatando la consecuente cadena de riesgos en calles y carreteras del país, por accidentes provocados por fallas mecánicas de vehículos en circulación.
Un coche en los Estados Unidos, está fabricado para durar en condiciones de “funcionalidad”, sólo 10 años; así está diseñado como producto comercial un vehículo automotor, pero por lo general está destinado a la reutiliación por la propia industria automotriz.
Ningún chasis es llevado despúes de su primer período de vida comercial útil; la industria automotriz los “rehabilita” y monta sobre ellos nuevas carrrocerías.
Muchos cabezales de motor tienen el mismo destino. Cuando se lleva un coche seminuevo a la agencia para darlo como “enganche” y sacar a circulación a cambio un modelo nuevo, muchos de esos coches no son necesariamnete llevados al cementerio de la “chatarra vehicular”;… son aprovechados y rehabilitados para hacer unidades de modelos recientes.
Y ni qué decir del tema de la contaminación que generan esos vehículo importados, en las zonas metropolitanas del país.
Tampoco se aborda el tema en este trabajo, de los muy abundantes casos de fraude comercial genérico y de la cconsecuente frustración que provoca en consumidores nacionales, la adquisición de “vehícuos inservibles”, vendidos por “buenos.
Sólo en México pasa eso
En muy pocos países del llamado “primer mundo”, circulan vehículos con más de 15 años de antigüedad; sólo en México y centroamérica;… ¡ah! y en Cuba, porque los modelos hasta 1959 que circulaban en el año del estallido de la Revolución, han sido “magistralmente” reparados y rehabilitados; ese es otro caso y desde luego, otro problema; ajeno básicamente a nosotros.
Y es que el fenómeno de la importación de vehículos que son “chatarra” en Estados Unidos, es rampante en nuestro país.
La “mañita” esa la impuso el PRI en sus peores años de clientelismo electoral, en los noventas, pero no el PRI nacional de Ernesto Zedillo, a quien poco le importaba en realidad que el PRI ganara o perdiera, que hiciera adeptos o enemigos, sino a los PRI chiquitos (estatales), cuyos líderes fueron acertados sobre sus pronósticos de debacle inminente y empezaron a aplicar medidas de proselitismo “inteligentes”, apoyando la economía popular de las familias; para eso no se les opuso Zedillo ni su “inner circle”, lo que les valió para que se retrasara de algún modo su caída en la aceptación popular.
Así, al amparo de los PRI´s estatales y municipales las diferentes “organizaciones civiles”, que bajo elpretexto egal del amparo y mediante una simple jurisdiccción voluntaria, tramitada en cualquier Juzgado Civil de Primera Instancia, cualquier ciudadano podía traerse “del otro lado” la “troquita” para las labores del campo,… consecuentemente se llenó de “carros chatarra” las calles y carreteras de este país… y también los talleres, los yonques…
Se reitera, esa fue una “maña electoral” priista, que ahora reproduce conveientemente Morena, instaurado ya como supremo gobierno.
Tan sólo de enero a octubre del año 2019, se importaron 127 mil 670 vehículos usados provenientes de Estados Unidos y Canadá, un incremento de 10.3% respecto al mismo periodo del año pasado.
Esta cifra es equivalente al 12% del total de vehículos nuevos vendidos en el mismo periodo en el mercado mexicano, según cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores.
Es dable recordar que este decreto fue modificado varias veces, a conveniencia; el 31 de enero de 2013, 30 de enero de 2014, 31 de diciembre de 2014, 31 de diciembre de 2015, 26 de diciembre de 2016, 28 de diciembre de 2017 y por último, el pasado 29 de marzo de 2019.
A partir del primer día del año y hasta el 31 de dicembre de este 2020, estará surtiendo efectos este Decreto que permite seguir importando vehículos de “cualquier año de antigüedad” de EU y Canadá, con las supuestas acotaciones ecológicas y mecánicas que están señaladas en dicho instrumento legal.
Así entonces, las reglas fijadas para la importación de autos usados que marca el Decreto no violan las garantías de igualdad, audiencia previa, irretroactividad, la libertad de trabajo ni al libre comercio, según la lógica del legislador.
Además de que existe jurisprudencia definida y obligatoria indicando que es acorde con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte y, consecuentemente no es violatorio del artículo 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, indicó la Secretaría de Economía (SE).
Por lo tanto, a partir del 1 de enero de 2020, se podrán importar autos usados provenientes de Estados Unidos y Canadá con cualquier año de antigüedad sin pagar arancel, siempre y cuando, presenten un certificado de origen que avale la fabricación del vehículo en norteamérica; se apeguen a la lista de precios estimados en la aduana y presenten un certificado de emisiones contaminantes.
Cabe señalar que a partir de jurisprudencia, se resolvió que es improcedente conceder la suspensión relativa a la regulación de importación definitiva de vehículos usados, al considerar que de concederse se seguiría perjuicio al interés social y se contravendrían disposiciones de orden público, agrega el DOF.
hch
