En muchas gobernanzas del ayer y del hoy existen y han existido múltiples oídos incapaces de escuchar y comprender las airadas críticas que ha formulado la abogacía independiente de la República. Esas togas de decencia y congruencia se lamentan de manera directa de que las autoridades que nos gobiernan se encuentren sometidos a una cadena de complicidades, a efecto, de brindarle impunidad a aquel narco-político que creó la alianza del Estado para participar de manera activa en diligencias de narcotráfico.
Una mirada retrospectiva en la historia jurídica nacional, demostrará sin lugar a duda, la verdad de los hechos denunciados en el ayer en contra del más importante narco-delincuente-político, que dio génesis a que el fenómeno de corrupción y degradación se infiltrara en la esfera de procuración e impartición de justicia.
Desde aquél entonces, la Procuraduría General de la República, hoy Fiscalía de la Federación, con un ardiente, vehemente y corrupto entusiasmo, se negó a indagar la verdad de aquellos hechos denunciados, hoy archivados, esos ruines investigadores del conocimiento, permanecieron y han permanecido ajenos a su misión constitucional, fueron silenciados y sometidos por tanto beneficio económico que recibieron para encubrir esas actividades delincuenciales; no obstante los esfuerzos y pedidos de justicia formulados por togas independientes y congruentes.
El espíritu de que se encarcele a ese narco-político jamás fenecerá. Hay ciertas enseñanzas contenidas en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que, en caso de no aplicarse, atentan en contra de la República e imprimen una marca indeleble de oprobio y desprecio de parte de la comunidad internacional; la cual, por ello, tilda a nuestro México como corrupto.
La Academia de Derecho Penal del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, seguirá tratando de que se saneen las instituciones de procuración e impartición de justicia, para que se sepa la verdad de aquella añeja denuncia, indicando y aportando, en su caso, todas las demostrativas de responsabilidad para beneficio de la justicia de nuestra Nación.
Si en la Primera Magistrada de la Nación, existe verdaderamente el decoro, esa toga bien comprendería que la corrupción de la narco-política es un fenómeno muy dañino para nuestra Patria y se decidiera a aplicar el Código Penal Federal y todos los principios de la Constitución Republicana, para darle a México el lustre que merece; de otra forma, las palabras mañaneras sólo quedarían en eso, palabras y sólo palabras.
Es cuánto.
Lic. Alberto Woolrich Ortiz.
Presidente de la Academia de Derecho Penal
del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, A.C..




