La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Percepción, además de realidad, mata columna
El pasado lunes, un variopinto de connotados opinadores de la prensa veracruzana, coincidieron en señalar que la candidatura de Cinthya Lobato Calderón, a la alcaldía de Xalapa, era una circunstancia que hacía replantear, de último momento, los escenarios de cara a la jornada electoral, algo así como la aparición de un ‘caballo negro’.
En este sentido, comentábamos que, durante el proceso para la gubernatura en el 2018, el ex candidato, José Yunes Zorrilla, fue el que más comentarios elogiosos recibió, de hecho, si la elección hubiera sido entre periodistas, habría ganado por ‘zapato’…sin embargo, como los que eligen son millones de ciudadanos, perdió por paliza, no obstante, vuelve sobre sus pasos.
Sobre el caso que nos ocupa, hay que precisar que súper Cinthya va postulada por un partido local de reciente creación (una franquicia electoral que ella y su pareja sentimental encabezan), cuyo nombre nadie puede recordar de botepronto, es decir, si logran el 3 % de la votación total necesaria para no perder el registro, bien les irá.
Por otro, la susodicha ha sido candidata a la alcaldía y a la diputación federal y local por la capital del estado y su rendimiento es malo, ha perdido más veces de las que ha ganado, lo suyo es pertenecer al selecto grupo de los plurinominales, por sus resultados los conoceréis.
No entraremos en otros detalles (indisciplina, deslealtad y un largo etcétera) que confirman que la doña no es como la pintan y que lo de las campañas no se le da, por eso, preguntamos: ¿esa es la estrategia ganadora?
Lo dicho, nadie experimenta en la cabeza de Pepe Yunes.