La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Aquí, el único que sale de la chistera, es el presunto mago
La mejor explicación, de lo que le ocurre a Dante Delgado, la dio su ex compañero de partido (no sabemos si también de sector), Enrique Alfaro, quién señaló que el veracruzano está ‘fuera de control’ y, además, lo tildó de ‘burócrata de partido’.
Trágico, que las acciones emprendidas por Dante, un personaje que ha sido exitoso, le generen un amplio repudio, por obstinarse en una estrategia que favorece, únicamente, los intereses de su franquicia partidista, no los de la sociedad, como pretende hacer creer.
Claro, de refilón apuntala el objetivo de MORENA, en el sentido de dividir a la oposición. Sería atrevido, sin datos sólidos, decir que existe un contubernio, sin embargo, la duda razonable, da mucho en que pensar.
Tiene razón Alfaro, insistimos, cuando afirma que el legislador está fuera de control, basta escucharlo en la radio para inferir, que lo suyo no es un análisis, sino, una catilinaria, mismas a las que son afectos los políticos en decadencia, cuando dan por hecho que poseen la verdad absoluta, en suma, un dirigente gagá.
El veracruzano, ha sustituido el instinto político, por presuntas habilidades de vidente, ha sí pues, sabe con certeza lo que los jóvenes anhelan y ¿qué creen que desean? (según el tío Dante), adivinaron, que MC boicotee la creación de un bloque opositor, o sea, el taumaturgo sólo cumple la voluntad del pueblo…¿les suena conocido?
En el futuro próximo, sabremos si el aludido todavía conserva rasgos de sensatez o, por el contrario, se aferra en impulsar a uno de sus esperpénticos norteños. Aunque, no es descabellado pensar, que todo fue un tongo, para reservarle una plaza al ‘carnal’. Veremos.