La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Ni hablar, se tendrá que conformar con una media naranjita
La presión, ejercida por MORENA y el FAM, que virtualmente ya cuentan con candidatas a la presidencia de la República, obligó al dirigente de MC, Dante Delgado, a mostrar sus cartas, por lo tanto, anunció que Samuel García, como opción interna y Marcelo Ebrard, como alternativa externa, son los dos aspirantes naranjas para la silla del Palacio Nacional.
Todo indicaría, que el ex canciller, lleva ventaja sobre el gobernador de Nuevo León (que ya solicitó licencia, pero, la aduana del Congreso local es complicada, ya que, no tiene mayoría a su favor), está mejor posicionado ante la ciudadanía, debido a que su carrera política acumula más años, que la edad del inexperto neoleonés.
Partiendo del hecho, de que Marcelo fuera el elegido de MC, la gran pregunta es ¿a quién quitará votos: a Claudia o a Xóchitl?
Desde luego, esto se definiría con la narrativa que adopte a lo largo de su hipotética campaña, es decir, si enfoca sus baterías contra la 4T o, por el contrario, asume un discurso propositivo, sin embargo, en cualquier sentido, la inercia del proceso lo llevará a minar los presuntos logros del actual gobierno federal.
Sin duda, el ahora hijo desobediente, enfrenta el reto de no hacer una campaña testimonial, lo cual sería un triste corolario a su trayectoria, por ello, debe calcular con meridiana precisión cada paso que dé, porque, si al final del día se impone la señora Sheinbaum, su futuro se verá más que comprometido.
El tiro parece cantado, no obstante, corre el riesgo de convertirse en un tirititito, ya se verá en que para el asunto.