Claudia Rodríguez
Es cierto que todos los años tienen 12 meses o 365 días, lo mismo que 52 semanas pero conforme crecemos parece que los años se miden en horas porque cada vez la vida nos pasa más rápido.
Apenas el diciembre anterior, los mexicanos hablábamos y disertábamos sobre el 2018 sin querer enfrentar que el mismo era el mañana inmediato y ahora el presente indiscutible. El hecho real es que el año electoral para elegir de nuevo presidente de México, está aquí y hay que encararlo como ciudadanos de la manera más responsable posible; en primera instancia votar en consciencia y no sólo de manera verbal, sino acudir a ejercer a las urnas nuestra ciudadanía por más añeja, de juventud o de primeros años que esta sea.
Lo que tenemos los mexicanos en términos de votantes frente a nosotros, es una decisión y es por eso que hay que poner en blanco y negro los pros y los contras de votar por uno u otro candidato que en sí representa un grupo con intereses propios.
Este espacio no pretende de ningún modo incidir en el sufragio del cual insisto sí debemos hacer efectivo en conciencia propia, pero sí instar a evaluar el desempeño de lo que cada uno de los candidatos representa.
No nos dejemos llevar por lo que los unos hablan mal de los otros, por el nombre de una alianza o coalición, por una buena propaganda o una canción, mucho menos por los estereotipos físicos; porque eso y más, no ayudarán a gobernar al elegido y en su caso ungido por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Es crucial ver quienes respaldan a cada candidato y cuál su trayectoria, sobre todo cuando han tenido responsabilidad de dinero público, e incluso encargo en la esfera de la Administración pública.
Las opciones para votar en la boleta de presidenciables está muy delineada: Ricardo Anaya (PAN-PRD-MC), Andrés Manuel López Obrador (Morena-PT), José Antonio Meade (PRI-PVEM-PANAL), así como Jaime Rodríguez “El Bronco” y Margarita Zavala como independientes si al final logran cumplir estos dos últimos con el índice de dispersión de firmas recabadas en 17 entidades, señalado por el Instituto Nacional Electoral (INE), ya que este mismo autorizó en la boleta para presidente de México, dos casillas.
Esta decisión ciudadana la tendremos que encarar en un país con récords de violencia, carestía y precios exorbitantes, crisis ambientales e inestabilidad internacional.
Aunque las campañas electorales parecen una fiesta, la verdad es que es un trabajo arduo a contracorriente para convencer la apatía y desencanto ciudadano.
Para advertir…. Y pese a todo, López Obrador parece inalcanzable.
Agradecimiento… A todos mis lectores y a todos quienes publican en sus diarios, blogs, páginas y demás el Acta Pública, mil gracias.
Que el 2018 sea un año en donde nuestras predilecciones de toda índole y sobre todo políticas, no nos enemiste. Y claro, bienvenido el debate.
Sin más, a encarar el 2018.
