Recuerdo que en la mañana del martes 11 de septiembre del 2001 escuché en la radio sobre el accidente luego conformado por el ataque en contra de las Torres Gemelas en NY.
Ese fue el ataque más fuerte que habían sufrido los EUA desde Pearl Harbor en la Segunda Guerra Mundial. Si Las Vegas hubiese pensado en apuestas para lo que pasó el 11 de septiembre del 2021 a veinte años del ataque, estoy seguro que nadie habría imaginado lo que sucedería en Afganistán.
DEL 9/11/01 AL 9/11/21
Los talibanes decidieron tomar protesta a su nuevo gobierno el día 11 de septiembre. Pudiendo hacerlo en cualquier otro día han decidido que esa es la fecha correcta para enviar un mensaje a sus seguidores y al mundo. Así es, los nuevos responsables del país no pudieron pedir mejor fecha que el vigésimo aniversario del día que Bin Laden escogió para asesinar a más de cinco mil inocentes en distintos ataques y en consecuencia cambiar al mundo, nuestra forma de viajar y hasta nuestro lenguaje.
Mohammad Hasan Akhund ha sido escogido por sus seguidores talibanes como el nuevo jefe del gobierno interino afgano. El gobierno se forma después de unas semanas de haber tomado el control del país por la fuerza y provocado la salida del gobierno electo con el beneplácito de los EUA.
Akhun se encuentra hasta este día en una lista negra emitida por la ONU de personas con sanciones por actos terroristas, él se desempeñaba como encargado de asuntos exteriores y después viceprimer ministro del gobierno talibán en Afganistán de 1996 al 2001 cuando los EUA los derrocaron por haber sido el asiento de Bin Laden y presuntamente coorganizadores del ataque contra EUA.
Al nuevo jefe de gobierno afgano se le conoce como Mullah, palabra de origen persa que significa doctor de la ley religiosa que es el Corán. Los Mullah son líderes político religiosos que usan un turbante de color negro si son descendientes de Mahoma o blanco sino lo son. La junta de gobierno talibán es un grupo de jefes militares religiosos que forman ahora el gobierno nacional de dicho país. Así las cosas durante los últimos 20 años Afganistán estuvo bajo un gobierno de ocupación norteamericana que promovía la participación de la mujer a la par de los hombres, la libertad de prensa, la libertad religiosa y otras prácticas consideradas como pecaminosas y que en consecuencia deben ser castigadas con golpes o la muerte.
Mullah Akhun era uno de los hombres más cercanos a Osama Bin Laden, ahora dirige los destinos de ese país. El ahora Jefe de Gobierno del Emirato Talibán declaró hace unos días que Osama era inocente de dicho ataque y que ahora que ellos estaban a cargo de Afganistán se respetaría los derechos de las mujeres pero bajo la ley islámica que los talibanes profesan. Esto ha incluido golpizas a mujeres y a quienes se atrevan a cuestionar las nuevas reglas.
MUERE LA REPÚBLICA DE AFGANISTÁN NACE EMIRATO ISLÁMICO DE AFGANISTÁN
20 años después del ataque, los talibanes se salen con la suya. Después de haber sido derrocados por los norteamericanos y de que muchos de sus líderes fueron encarcelados por su complicidad con Al Qaeda. El movimiento religioso político Talibán fue removido y reemplazado por un gobierno semidemocrático con el respaldo militar de los EUA durante todos estos años.
A la salida de las tropas de los aliados, los líderes talibanes de inmediato tomaron la mayoría de las ciudades y como sabemos la capital hace tres semanas reinstaurando su forma de gobierno teocrático.
Hace tres días circuló por redes sociales un video de dos jóvenes periodistas con fuertes golpes en todo el cuerpo, ellos confesaron que habían sido atacados a palos y a fuetazos por policías que se molestaron porque ellos estaban filmando una protesta de mujeres en contra del régimen a las que también sometieron a golpes. Durante la golpiza les dijeron que tenían suerte de no ser decapitados. Esta es la vida bajo el nuevo sistema Talibán, que para la Casa Blanca en Washington es un grupo con mentalidad de “profesionales y un modelo con mente empresarial”. ¡Que declaración tan ridícula y falta de visión!
Del nuevo gabinete afgano-talibán se reconocen además del líder Mullah Ahkun, a al menos a otros 13 que también están en la lista negra de terroristas o asociados emitida por la ONU. Entre ellos resalta el nombre del encargado de seguridad tanto pública como nacional, Sirajuddin Haqqani en contra del que hay una recompensa de $10 millones de dólares para su captura ¿Qué? Así es, si usted ingresa a la página del FBI de EUA verá el nombre de ese señor y el de su tío (por el que se ofrecen $5 millones de dólares), ambos como altos blancos del gobierno americano, por lo que si quiere, avíseles que están en las oficinas del departamento de gobierno de Afganistán, usted se gana una muy buena lana y nos comparte la recompensa; en esas listas de los nuevos integrantes del gabinete afgano, también están otros cinco líderes que estuvieron detenidos en la base norteamericana de Guantánamo en Cuba por actividades terroristas hasta que en el 2014 fueron liberados por Obama quien los intercambió por un soldado desertor que se había tratado de sumar a los locales y fue capturado por ellos quienes pensaban que era un agente de la CIA. El gabinete del Emirato es una lista de “quién es quién” en el terrorismo regional con varios integrantes que son buscados por las autoridades internacionales.
Varios de los ahora altos líderes políticos talibanes, son un grupo de liberados por los gobiernos de EUA en acuerdos con la administración Obama y la Administración Trump. ¿Coincidencia que Biden no quisiera matar a Osama Bin Laden en el 2011? Sea como sea, a los talibanes Biden no les es ajeno, como se sabe durante el Gobierno de Obama, Bin Laden pidió no tratar de matar a Biden durante su viaje a la región.
LA FOTO DEL ANIVERSARIO DEL 9/11 VISTA DESDE ORIENTE
En una postura humillante y casi de súplica el gobierno de EUA se apresura a echar porras al nuevo gobierno Talibán por permitir que salgan personas del país, a pesar de que los mantiene detenidos por días en los aviones ya en pista, diciendo que son un “nuevo Talibán” con “mentalidad casi empresarial”, esto mientras en las calles se persigue y golpea a los disidentes y a las mujeres que van sin hombres que las acompañe, ni pensar en mujeres con cargos de poder. Se asesina a los homosexuales y muchas cosas por el estilo. Vasta escuchar las declaraciones del vocero del nuevo gobierno el pasado 9 de septiembre sobre la posible participación de la mujer en el nuevo gobierno “…No es necesario para una mujer estar en el gabinete. Una mujer no puede ser ministro… Ellas deben dedicarse a dar a luz y a criar a los niños de acuerdo con la Ley islámica…”
Como advertí hace unas semanas, China, Rusia e Irán estarían atentos a lo que sucediese a la salida de los poderes occidentales encabezados por los EUA.
Mientras que en EUA los políticos se enfrentan para ver quién fue menos tonto y más patriota en este vigésimo aniversario del ataque terrorista de Bush a Biden, en Kabul la foto es un gobierno encabezado por los mismos talibanes que se suponía serían derrotados por haber apoyado a Al Qaeda; en EUA los jóvenes piden menos nacionalismo mientras que en Afganistán el gobierno sólo habla de haber expulsado a los infieles extranjeros; mientras que en EUA los familiares de las víctimas del atentado y de los soldados muertos durante esa guerra de 20 años recuerdan a sus muertos, en Afganistán, los talibanes elevan la bandera de ese grupo en la que fue la Embajada de los EUA en dicho país hasta hace tres semanas. Finalmente los americanos se enfrentan por las vacunas o el uso del lenguaje mientras que China, Rusia e Irán son los invitados de honor en la muy exclusiva toma de protesta del gobierno Talibán a la que únicamente invitaron a seis naciones, todo ello el mismo día 11 de septiembre del 2021. De paso China recuerda que Taiwán es parte de China y se afila los dientes para culminar el trabajo ahora que puede.
En Afganistán Mullah Akhun y sus aliados festejan su regreso victorioso sobre los EUA y en Occidente se lamen las heridas. Un nuevo Vietnam pero mucho más penoso. La retórica de los líderes de Al Qaeda apoyados por el régimen Talibán de la época, que estaba formado casi por los mismos individuos que hoy regresan al poder era clara, “Alá nos dará la victoria”. El hombre que planeó el ataque, digamos la mente maestra debajo de Osama Bin Laden, Khalid Sheikh Mohammed dijo al Juez de su caso en Guantánamo Cuba “…venceremos porque los americanos no se dan cuenta que no necesitamos ganar militarmente, sólo necesitamos pelear por el tiempo suficiente para que ellos mismos se derroten…” irónicamente este sujeto sigue aún en prisión, en espera de su sentencia a pesar de que se declaró culpable. Su confesión fue desechada por el gobierno de Obama quien quería sacarlo de la prisión militar y pasarlo a un juzgado civil, cuando dejó libres a cinco talibanes que ahora son integrantes del gabinete afgano. El organizador confeso sub alterno de Osama no ha sido juzgado y ahora festeja que sus amigos están de nuevo en el poder de Afganistán en el exacto aniversario de su ataque.
La televisión del nuevo gobierno afgano ha estado pasando un video de 40 minutos en los que presume su campamento de soldados suicidas Al-Fatih, reiterando que lo que pasó en EUA hace 20 años fue culpa de los propios americanos quienes son el origen del mal que les atacó. El líder militar del nuevo gobierno sentenció “… los egresados de este campo han realizado muchos sacrificios durante los últimos 20 años, incrementaremos nuestros esfuerzos para aumentar la fuerza y equipo de este grupo (escuadrones suicidas), usaremos todos los recursos de acuerdo con la guía del Sharía del Islam” que según ellos da sustento al Jihadista ultra radical.
A veinte años del atentado, hay que recordar que muchos de nuestros paisanos legales o ilegales residentes en NY también fallecieron, ya sea sepultados como trabajadores en las torres o como voluntarios en el auxilio de las víctimas y por ellos hay que orar. Algunos incluso anónimos u otros con reconocimiento tardío como por el héroe Jalisciense Rafael Hernández quien falleció el 24 de Septiembre del 2011 por complicaciones en los pulmones ocasionadas porque asistió como voluntario en los servicios de emergencia de esa trágica mañana del martes 11 de Septiembre del 2001.