Día Hábil
Alfredo del Mazo es una vergüenza para el Estado de México y para su clase política.
Un traidor.
Anoche, el ex gobernador fue expulsado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), colores y siglas con los que alcanzó todo lo que cualquier político puede soñar: poder, pularidad… y dinero.
Misma ruta de otros doble cara.
Su padre, Alfredo del Mazo González, también fue gobernador de ese estado, así como su abuelo, Alfredo del Mazo Vélez.
Son dueños de medio Atlacomulco o de Atlacomulco y medio.
Del Mazo Maza, mandatario mexiquense todavía hasta septiembre de 2023, entregó el gobierno a Andrés Manuel López Obrador, creador y dueño de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), mediante su protegida Delfina Gómez Álvarez.
Jamás dio la cara, jamás hizo un señalamiento o crítica al gobierno de López Obrador y, por el contrario, lo recibía constantemente en sus giras o visitas.
Entregado, como Omar Fayad, de Hidalgo; Alejandro Murat, de Oaxaca; Quirino Ordaz Coppel, de Sinaloa; Claudia Pavlovich Arellano, de Sonora, y Carlos Miguel Ayza, de Campeche.
Casi todos con una embajada como agradecimiento a la entrega de la plaza y como premio a su servilismo, pero, sobre todo, a su traición al PRI y a los partidos que se coaligaron para llevarlos al cargo.
Alfredo del Mazo tiene un punto más en contra: es primo de Enrique Peña Nieto, el ex presidente que no puede ser visto ni de lejecitos en México, y ya es parte del negro historial de su banda del Estado de México, en la que aparecen Eruviel Ávila Villegas y, recientemente, Alejandra del Moral.
Los primeros, ex gobernadores, y, la última, candidata perdedora en 2023 ante Delfina.
Así de congruentes.
Esto, sin contar a Miguel Ángel Osorio Chong, Claudia Ruiz Massieu Salinas, Nuvia Mayorga y más. Todos, en manos de López Obrador.
Todos, purificados por afiliarse formalmente o sólo de palabra con el resentido tabasqueño que nada más llegó al poder comenzó a cobrar cuentas y a aplastar a todo aquél que no piense como él.
Y todos, después de haberse servido del PRI para conseguir sus objetivos.
Alfredo y Eruviel son tan cobardes y traicioneros que se han atrevido a ventilar entre sus cercanos y en redes sociales pasajes de su vida con el dirigente tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas –Alito, como le llaman desde pequeño-, lo que además de ser ruin les exhibe como lo que son: dos tipos de poco valor.
CDMX, Morelos, Veracruz y Congreso
En Palacio Nacional, el incongruente que cobra como presidente sabe que las encuestas, esas que dicen lo que el que las paga quiere escuchar, no son reales, están cuchareadas –como él dice- por lo que hay preocupación, no hay certeza ni en la elección presidencial pese a todos los asegunes y la millonada que le metieron a su candidata ni, mucho menos en CDMX, Morelos, Veracruz y el Congreso.
Se acabó la especulación: el domingo se conocerá la encuesta real, la verdadera: la de las urnas.
Vámonos: Viernes, quincena, calor, fin de mayo.
¡Buen fin de semana!
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex