homopolíticus
- Espectáculo Dantesco en el Centro de Cuernavaca
Los senadores Gerardo Fernández, Adán Augusto López, Alejandro Murat, Saúl Monreal, Félix Salgado, Manuel Velasco y Miguel Ángel Yúnes aprobaron una violación suave a la soberanía mexicana.
Para ellos y otros 110 senadores del país —alfombra de la intrusión trumpista— no habrá solicitudes de fusilamiento en Canal 11 del director del Fondo de Cultura Económica, el gachupín refugiado de la Guerra Civil española, porque entran licenciados por el gobierno de la Cuatroté.
Deseó Francisco Ignacio Taibo —insisto: su apellido materno es Mahojo— pena de muerte a los traidores a la patria que se pusieran del lado de Mr. Donald J. Trump, el presidente de Estados Unidos de Norteamérica que tiene en un puño al gobierno de México desde el 20 de enero y no lo ha soltado, enviando fuerzas especiales a México, son permiso o sin permiso.
El pelotón de fusileros frente a la hilera de 117 senadores traidores a la patria, en el Cerro de las Campanas, en el estado donde nació la Constitución de 1917, mancillada de 2018 a 2025, como a Maximiliano de Habsburgo y los generales Miguel Miramón y Tomás Mejía, es la contemplación de uno de los distinguidos miembros del ala pensante de la Cuatroté patriotera, por cierto, de origen extranjero, a favor del primer imperio obradorista e inicio del segundo piso de la cuarta transformación que nomás no termina por empezar, porque el primer piso destruyó las instituciones democráticas.
Si la aún república lopezobradorista reprobó en 2020 el llamado igual de nefasto de quemar vivos a militantes de MORENA en el Zócalo —el escribiente quemó el libro México engañado, en oposición a tan aberrante deseo de su autor—, de parte de otro pensador idéntico que Taibo Mahojo, Francisco Martín Moreno, debe ser reprobado por los suyos y deslindarse cada uno del deseo de muerte, a menos que lo compartan. Los soldados del Ejército estadounidense entraron por la puerta grande a México en tareas de operaciones especiales, sin resistencia ni Himno Nacional.
letraschiquitas
Si la visita de Alejandro Armenta a Morelos desdobló en un espectáculo dantesco a docenas de militares y guardias armados, sitiado el centro de Cuernavaca —¿por qué tanto miedo?— con vehículos estacionados a doble fila, la exhibición vulgar por soberbia de ayer, para la rueda de prensa del jefe de policía, Miguel Ángel Urrutia, fue casi igual, invadiendo incluso las zonas peatonales y bloqueando los paraderos del transporte público, empatando con ello la liza de prepotencia gubernativa, esa que se paga en las urnas al siguiente concurso electoral***. Los senadores morelenses Juanita Guerra, Ángel García y Víctor Mercado votaron a favor de la incursión a suelo mexicano de los soldados de un ejercito extranjero, acción que, oh, sorpresa, no publicitaron en sus redes sociales, tan dados a ello, sabedores de lo malo de su acatamiento a una orden superior… extranjera***. Será el próximo miércoles, día 19, cuando sesione la Sección Instructora —Adriana Belinda Quiroz [MORENA], Raúl Bolaños-Cacho [PV] y Germán Martínez [PAN], así como ¿el retardatario? Hugo Éric Flores [MORENA]— el desafuero de Cuauhtémoc Blanco, denunciado por violación en grado de tentativa.