Anahí García Jáquez
Condado de Lee, Virginia, E.U. Década de los 90´s. El pequeño Damon Fields vive con su madre en una casa rodante y parece que, desde su nacimiento, su destino está marcado pues las circunstancias que le rodean no son las ideales. Pero eso no le importa a Damon, porque se las arreglará para desafiarlas.
Demon Copperhead es un trabajo de la escritora estadounidense Barbara Kingsolver, quien se inspira en David Copperfield, una de las obras más famosas de la literatura no sólo de habla inglesa, sino universal, para su primera novela, la cual se hizo acreedora del Premio Pulitzer. El título de este texto hace alusión al apodo del protagonista, quien tiene el cabello rojo como un demonio y traslada la acción de la Inglaterra victoriana de Charles Dickens a las Montañas Apalaches de los 90´s. Es en esta parte rural de los Estados Unidos que Demon nace de una madre adolescente y desde ya es huérfano de padre, pues éste fallece ahogado. El pequeño crece viendo a su madre adicta y tiene que ser separado de ella, por lo que empieza a recorrer varios hogares temporales o de acogida, como se les conoce, en los que es expuesto a un sinfín de ambientes que no son los indicados para un niño.
Es a través de esta anécdota que la autora expone la situación real de la población de las zonas rurales de Estados Unidos, donde la pobreza está presente producto de la explotación de la gente y de los recursos naturales a manos de poderosos quienes, una vez que se sirven de los más desfavorecidos, los desechan y los dejan a su suerte.
Como consecuencia natural, donde no hay prosperidad hay enfermedad y los habitantes, al acudir a los médicos de la región, se encuentran con que éstos están al servicio de las empresas farmacéuticas y por lo tanto, les recetan indiscriminadamente generando con ello una serie de problemas sociales que suelen desembocar en tragedia: niños huérfanos o abandonados porque sus padres han sido encarcelados o simplemente porque ya no pudieron o quisieron criarlos, o porque la dependencia a las sustancias ilícitas es muy fuerte y no pueden librarse de ella por más que lo deseen.
Demon nos va contando cómo es que estos panoramas tan desalentadores son el pan de cada día para él y, para ello, la autora lo rodea de personajes muy variopintos que se van incorporando conforme avanza el texto. Algunos de ellos serán ángeles de la guarda para el protagonista, mientras que otros le harán ver su suerte pero, eso sí, siempre complementando el relato principal.
Demon Copperhead es un texto duro y crudo ya que, aunque sea ficticio, lo relatado es tan real que puede ser la historia de una persona o de muchas que viven en el vecino país del norte, pues la explotación infantil, los hogares temporales y la marginación, temas expuestos y criticados aquí, suelen ser ampliamente reseñados.
Sin embargo, la autora ha dotado a Demon de un sentido del humor que le permite sobrellevar sus cuitas de la mejor manera posible, además que también el amor, la amistad, la generosidad y la caridad se hacen presentes. Es pues, este joven, un claro ejemplo de una especie de héroe que intenta salir adelante jugando las cartas que la vida le ha dado y sortea todos y cada uno de los obstáculos, o al menos lo intenta al mismo tiempo que preserva su humanidad, pues perderla significaría perderlo todo. Y es un lujo que no puede darse.
Demon Copperhead. Barbara Kingsolver. 2022. Editorial Navona.