Las noticias alarmantes del conflicto en Michoacán, me recuerda la Guerra en Bosnia, el conflicto internacional que se desarrolló del 6 de abril de 1992 al 14 de diciembre de 1995. La causa, la compleja combinación de factores políticos y religiosos: exaltación nacionalista, crisis políticas, sociales y de seguridad.
Si los sucesos en la tierra del Tata Cárdenas no son similares, con excepción de la presencia del crimen organizado, la respuesta la representa la africanización en ese vasto territorio. En donde la vida no vale nada, la carencia de los valores morales o el respeto a las instituciones es inexistente, la justicia se hace con propio puño, con razón o sinrazón. Y la crueldad en contra de los connacionales solo es semejante a la de la Revolución, la guerra fraticida entre liberales y conservadores, que hoy revive inadmisible.
Cuáles son los síntomas; los doscientos años de inequidad, de corrupción, de pobreza, o la absurda guerra de Calderón, el desgobierno corrupto del perredista, Leonel Godoy, o, a la ausencia del actual gobernador, eterno convaleciente, Faustito Vallejo Figueroa.
Es gravísimo que la sociedad tome por su cuenta la seguridad municipal, pero aun, mas delicado, la embarazosa declaración del secretario de estado estadounidense Kerry, al manifestar preocupación por el desarrollo de los acontecimientos. ¡Sin ser ave de mal agüero! Que no nos tome por sorpresa la visita de tropas del vecino del norte, aunque pataleemos, nos zurremos en el nacionalismo, de niño héroe, abrazados al lábaro tricolor.
La situación es un polvorín a punto de correr a los estados vecinos, Guerrero, tierra fértil para continuar el incendio, Jalisco que no canta mal las rancheras y, lo que nadie cuestiona-miopes nacionalistas- es que la crisis podría llegar hasta California, sí, al mismísimo estado en donde radican las luminarias internacionales, y el crimen organizado esta bien asentado.
La llamada de atención del secretario John Kerry es fundada.
Mientras Michoacán es tierra de nadie, aquí, festejamos uno de los pocos fines de semana largos, miramos los playoffs del fútbol como si nada sucede, a la vez, que homenajeamos a Martin Luther King, a quien catalogan mártir de los derechos civiles.
De acuerdo, se reconoce su lucha por la reivindicación de esos a favor de las personas de color. De luchador a mártir existe un largo tramo, el muchachón Martin no merece tal calificativo, si no revise su biografía, su accidentado transitar por el mundo deja mucho a pensar…
Es escandolosa la posibilidad de tropas norteamericanas en el pais.
Reconozco que la inseguridad no la detiene, este, supuesto gobierno vertical, dice que hace, mas no logra atemperar la realidad. Como avestruz se esconde. Quien tiene razon?
M
En desacuerdo con el senor Cazalet, es solo periodismo amarillista.
Mexico, jamas aceptaria tropas norteamericanas, el gobierno puedo con esa guerra y mas
Mnedez