José Palmar un sacerdote contrario al presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, afirmó que el controvertido político socialista falleció, en La Habana, tras la cuarta intervención quirúrgica para contrarrestar el cáncer que lo aquejó durante los últimos dieciocho meses.
De acuerdo a José Palmar la noticia del deceso de Chávez se daría a conocer el 17 de Diciembre. El vicepresidente, Nicolás Maduro, nombrado para el cargo, el pasado día 8, previo a la intervención de Chávez, comentó que a pesar de la complejidad de la cirugía, se espera que el proceso de recuperación del mandatario sea exitoso.
Los escenarios probables que enfrentaría Venezuela, en caso de confirmarse la noticia del sacerdote Palmar, serían una turbia transición de poderes, a pesar, que el comandante Chávez, favoreció a su amigo Maduro para tomar las riendas del País.
En la esfera internacional los mercados petroleros no reaccionaron como en las ocasiones anteriores, al darse a conocer de la enfermedad de Chávez. La contempló con apatía.
Nicolás Maduro es el hombre de las confianzas de Chávez, al considerarlo el candidato idóneo para continuar la “revolución socialista” en Venezuela, el Sueño Bolivariano, pero sin el carisma ni la autoridad, entre la población y los militares, con la que cuenta el mandatario.
El anuncio público, que hiciera Chávez, sobre el nombramiento de Maduro como vicepresidente, también, dio a entender que por su enfermedad no estaría en condiciones de continuar en la presidencia.
Hasta el momento nadie ha contradicho el nombramiento de Maduro, ministro de Exteriores y vicepresidente, sin embargo, no se debe descontar el poder de Diosdado Cabello quien controla al partido y al parlamento, además, de provenir del las fuerzas militares.
La reacción de la ciudadanía, opuesta al líder del movimiento Bolivariano, que favoreció con el 47% de los sufragios, en las últimas elecciones de Octubre pasado, a Henrique Capriles Radonski, podría polarizar, aun mas, al país.
Este escenario no se aprecia prometedor, la participación de la base chavista en defensa de los logros sociales, aunado a la probable intervención del ejército que es mas proclive al nacionalismo que al socialismo, podría convertir a Venezuela en un polvorín y contaminar a la región, en particular, a los aliados de Bolivia, Ecuador y Cuba.