Las “Píldoras Venenosas” que podrían matar a la reforma de inmigración.
Como usted sabe apreciable lector mi pesimismo optimista por una verdadera reforma a lay de inmigración va mas allá de echar las campanas al vuelo anticipadas, a brindar un aplauso de pie al grupo de los 8 senadores encargados de promoverla, y por supuesto, nadie, me convence en contra, que cualquiera que sea el resultado, será mucho mas severo a la ley vigente.
Las “Píldoras Venenosas” no es un a frase de mi cuño, sin embargo, la retomo porque exhibe sin vergüenza los tropiezos mil a los que se enfrentará en su camino la reforma.
Si para usted después de leer los absurdos que se describen abajo le dejan el amargo sabor de boca, que me dejaron, me motiva saber que no soy el único ser viviente capaz de digerir lo que a todas luces los legisladores no desean aprobar.
Para su información y juicio:
Al inicio de la discusión del proyecto de ley S. 744, relativa al Acta de Seguridad Fronteriza, Oportunidad Económica y Modernización Migratoria (Proyecto de Reforma Migratoria del Grupo de los Ocho del senado), se ofrecieron 45 enmiendas en la discusión del pleno del Senado.
Enmienda 1225. Del senador Marco Rubio (republicano de Florida). Requiere que los inmigrantes con estatus RPI mayores de 16 años tengan que leer, escribir y hablar el idioma inglés.
Enmienda 1219. Del senador Joe Manchin (demócrata de Virginia). Requiere que ciertos extranjeros que entraron al país cuando niños tengan un grado universitario antes de recibir residencia permanente.
Enmienda 1202. Del senador Rand Paul (republicano de Kentucky). Prohíbe a cualquier inmigrante que obtenga estatus RPI o ajuste a residencia permanente recibir cualquier asistencia federal, estatal o créditos impositivos. Esto incluye cualquier servicio médico excepto de emergencia, Medicaid estatales, Medicare o Seguridad Social. Si llegan a recibir alguno de estos servicios, se prohibirá que se hagan ciudadanos.
Enmienda 1210. Del senador Mike Lee (republicano de Utah). Prohíbe que fugitivos de la deportación o que intentaron entrar al país después de una orden de deportación reciban estatus RPI (estatus de inmigrante provisional registrado).
Enmienda 1204. Del senador James Inhofe (republicano de Oklahoma). Declara al inglés el idioma oficial de Estados Unidos (Nota de edición: algo que no ha sido en 230 años de la existencia del país).
Enmienda 1205. Del senador James Inhofe (republicano de Oklahoma. Empleadores pueden prohibir libremente el uso de idiomas diferentes al inglés en el trabajo.
Enmienda 1201. Del senador David Vitter (republicano de Louisiana). Prohíbe recibir cualquier estatus legal a cualquier individuo sin autorización para estar en el país hasta que el Secretario de Seguridad Nacional declare totalmente implementado en cada puerto de entrada el sistema US Visit de entrada y salida.
Enmienda 1200. Del senador Rand Paul (republicano de Kentucky). Busca endurecer más la seguridad fronteriza y la aplicación de las leyes contra indocumentados y ofrece detalles sobre cómo medir la seguridad fronteriza. Incluye requerimientos extremos como detención obligatoria para todos los procesados por autoridades migratorias.
Enmienda 1197. Del senador John Thune (republicano de Dakota del Sur). Requiere que antes de otorgar estatus de RPI a cualquier indocumentado, se debe terminar la construcción de 350 millas de doble muro reforzado en la frontera y que antes de otorgar residencia permanente, se deben de haber completado 700 millas del mismo tipo de muro.
Enmienda 1196. Del senador John Thune (republicano de Dakota del Sur). Retrasa estatus RPI hasta que los gobernadores de los estados fronterizos aprueben la estrategia federal de la frontera y certifiquen que ha sido substancialmente implementada.
Enmienda 1182. Del senador Patrick Leahy (demócrata de Vertmont). Requiere que dentro de las leyes de inmigración se reconozca cualquier matrimonio que esté de acuerdo con las leyes del estado o país en el que dicho matrimonio se haya realizado.
Enmienda sin número. Del Senador John Cornyn (republicano de Texas). Previene que inmigrantes con RPI ajusten a residencia permanente si no se han logrado ciertas condiciones de seguridad fronteriza, como 90% de detenciones, entre otras.
Así que si usted era de los convencidos de que se aprobaría la reforma, con lo anterior se unirá a mi fila de pesimista optimista.