El derecho a portar armasEl lunes pasado durante el primer día de clases en una de las mejores escuelas de Norteamérica, la Perry Hall High School de Baltimore, fue baleado un estudiante de 17 años cuya identidad no ha sido revelada, por un adolescente de 15 años Robert Wayne Gladden Jr.
De acuerdo a Susan Hunt la vocera del departamento de policía de la ciudad, el joven Gladden disparó al azar, sin motivo ni víctima determinada, sin embargo, de acuerdo a la declaración del padre del agresor, la causa fue el bullying. En julio, James Goldman mató a 12 personas e hirió a 58 en un cine de Aurora Colorado.Un tirador, “en defensa de la supremacía de la raza blanca,” mató a 6 personas afuera de un templo islámico Sikh, en Wisconsin. Antes de ser capturado por las autoridades, se suicidó.El hecho causó estupor entre los islámicos y, a pesar, que la primera dama Michelle Obama se presentó para dar las condolencias a los deudos, la furia, frustración e incomprensión se mantiene entre los concurrentes al templo.Durante el fin de semana, murieron 8 personas en Chicago como resultado de enfrentamientos con armas de fuego entre pandillas locales. El 14 de agosto a dos cuadras de la universidad A&M en Texas, Thomas Caffall, mató al asistente del jefe de la policía de la estación College y a un transeúnte que tuvo la mala suerte de estar en el lugar y el momento inapropiados.El asesinato el viernes 24, del vicepresidente de Hazan Imports, Marc Ercolino a manos de un ex-empleado, Jeffrey Johnson, en una de las zonas más concurridas de Manhattan. La Quinta Avenida y la calle 34, a la entrada del icónico Empire State Building, cobró atención mundial.Otros eventos similares, incluyen balas perdidas que hieren o matan a infantes, a adolescentes, a inocentes, como los que suelen suceder en el Bronx o Brooklyn.Los hechos quedan perdidos entre las páginas de los diarios locales de Nueva York.No así, en la indignación de los habitantes de esos condados que protestan ante las autoridades policíacas y le solicitan al alcalde medidas más severas para controlar el uso de armas. Como le comenté en la última entrega la otra asignatura pendiente a ser revisada por el congreso, además de la reforma migratoria, es el derecho a portar armas, si bien, se trata de una de las 27 enmiendas a la constitución, su origen en 1871, merece actualizarse de acuerdo a las circunstancias que exige el siglo XXI. Los actos de enmienda a la ley, incluyen aquella que firmó el presidente Johnson en 1968, tras los asesinatos del John F. Kennedy, Malcolm X, Robert F. Kennedy y Martin Luther King, que controla el comercio interestatal de armas de fuego, sin menoscabo del derecho a portarlas.La ley Sullivan de 1911, exigía a los neoyorquinos a obtener permiso para usarlas, aunque, causó polémica su implementación, por considerarla discriminatoria en especial a los inmigrantes italianos.La ley Brady, que exige conocer los antecedentes de quienes las adquieren. Probablemente el mayor intento para controlar el uso indiscriminado de armas es la ley; Violent Crime Control and Law Enforcement Act, firmada por el presidente Clinton en 1994. Otorga un presupuesto de $9.7 billones de dólares para mejorar el sistema penitenciario, armar a cien mil oficiales de la policía, establecer programas de prevención y excluir del uso de éstas a determinadas “clases de individuos,” así como, la reclasificación del tipo de crímenes, los castigos, la pena de muerte y se liga a otras leyes como la de inmigración, de crímenes por odio racial y sexual. La realidad es, que quien desea adquirir armas de fuego lo puede hacer de acuerdo a la reglamentación al respecto en cada estado. La tarea solo se facilita o se hace engorrosa por la información que debe ofrecer el comprador. Sin descontar las ventas online, en donde la flexibilidad de adquisición y anonimato reinan.La venta indiscriminada de armas de fuego es causa de preocupación entre la ciudadanía. Se manifiesta, y cada día se escuchan más voces a favor de la reglamentación. El ciudadano común, se cuestiona; si contamos con fuerzas de seguridad pública confiables, ¿para qué un civil necesita una pistola?…La principal defensora, a que la enmienda constitucional no se modifique, es la NRA(National Rifle Association) cuyos cabilderos influyen a su favor ante los miembros republicanos del congreso. El motivo es simple; la producción y venta de armas de fuego sin limitantes al mejor postor es un negocio billonario. A mayor discreción legal, mas ventas. Gane quien gane las elecciones presidenciales, a pesar, del creciente clamor popular por la reglamentación, se augura, que el tema se quedará en los sinuosos laberintos del congreso.