Ricardo Del Muro / Austral
La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó este domingo un evento masivo en el Zócalo de la Ciudad de México, para cerrar su gira nacional con motivo de su primer informe de gobierno, donde destacó los avances en seguridad, principalmente la reducción de los homicidios dolosos en 32 por ciento, destacando once entidades, entre ellas Chiapas que registró una disminución de 73% por ciento, la mayor del país después de Zacatecas.
Aunque Sheinbaum en su mensaje hizo un amplio reconocimiento a su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, los resultados en materia de seguridad muestran un cambio significativo respecto a la política de “abrazos, no balazos” que caracterizó al Lopezobradorismo.
Durante años, la inseguridad ha sido el principal problema nacional y el mayor obstáculo para atraer inversiones, impulsar el turismo y recuperar la tranquilidad social. Hoy, los resultados comienzan a reflejar una política más firme, coordinada entre las autoridades federales y estatales, además de basarse en una eficiente tarea de inteligencia.
En los hechos, el cambio ha sido notorio. El gobierno de la presidenta Sheinbaum ha reforzado la coordinación entre las fuerzas armadas, la Guardia Nacional y las fiscalías estatales, destacando la reducción de homicidios en once entidades: Zacatecas (88%), Chiapas (73%), Jalisco (62%), Nuevo León (61%), Guanajuato (47%), Sonora (46%), Puebla (45%), Tabasco (44%), Estado de México (43%), Baja California (25%) y Guerrero (22%).
El resultado, según cifras oficiales, es una disminución constante de los homicidios, secuestros y extorsiones, además de una recuperación del turismo y de las inversiones privadas en regiones antes asoladas por el crimen organizado.
En el caso de Chiapas, la reducción del 73% en homicidios es muy significativo y refleja las acciones que está realizado el gobierno estatal para restablecer el Estado de derecho y la paz en varios municipios, principalmente en la sierra y la frontera sur, que se convirtieron en rehenes de los grupos del crimen organizado que se disputaban el control de rutas migratorias y de contrabando.
Ante una multitud de simpatizantes morenistas que se reunieron en el Zócalo de la Ciudad de México, la presidenta Sheinbaum afirmó que México va por el camino correcto y reafirmó su compromiso con la Cuarta Transformación que, dijo, “le pertenece al pueblo”.
La presidenta señaló que los resultados obtenidos son fruto del trabajo conjunto entre el gobierno y la ciudadanía. “La paz se construye todos los días con justicia, con bienestar y con la participación del pueblo”, expresó.
El país vive un momento histórico – resaltó -, ya que llegaron todas las mujeres al Gobierno y se transita por el camino de la justicia social, de la dignidad y de la garantía de los derechos sociales, la libertad, la democracia y la soberanía. Lo que no es un logro menor ni pasajero, sino el fruto de décadas de lucha pacífica, de organización y resistencia.
Sheinbaum aprovechó el multitudinario evento para explicar que la reforma a la Ley de Amparo que recientemente propuso, garantiza a los ciudadanos sus derechos frente a cualquier acto de autoridad. Eso está totalmente salvaguardado. Su objetivo es hacer una impartición de justicia más rápida, más expedita; garantizar la pronta actuación contra el lavado de dinero y evitar que el amparo se vuelva el resguardo de por vida de los potentados de antes que no quieren pagar sus impuestos.
Destacó el hecho de que casi al inicio de su mensaje, la presidenta hizo un público reconocimiento al expresidente Andrés Manuel López Obrador. “Se han empeñado en separarnos, en que rompamos – dijo -. Su objetivo no es otro más que el de acabar con el movimiento de Transformación, que nos dividamos. Pero eso no va a ocurrir, porque compartimos valores: honestidad, justicia y amor al pueblo de México”.
“Andrés Manuel López Obrador fue, es y será siempre un ejemplo de honradez, de austeridad y de profundo amor al pueblo de México. Nunca se rindió ante la presión, nunca se vendió a los poderosos, nunca se apartó de sus principios. Y escúchenlo bien: su Presidenta, tampoco lo hará, porque tenemos convicciones, tenemos principios. Porque por más duras que sean las presiones, nosotros solo hacemos reverencia a uno solo: al pueblo de México”.
La presidenta Sheinbaum también expresó su seguridad que se llegará a un buen acuerdo con Estados Unidos y con todas las naciones del mundo con relacióna nuestras relaciones comerciales.
Sin embargo, expresó su respaldo a los migrantes. “Nos enorgullecen los migrantes mexicanos, que con valentía cruzan fronteras pero nunca dejan el amor por México” y reiteró la postura de respeto a la soberanía del país: “Hoy más que nunca sabemos – afirmó – que la soberanía no se implora, se ejerce con dignidad, con fervor, con pasión, sin arrogancia, con la fuerza de millones de mexicanas y mexicanos”.
Frente a cualquier deseo de injerencia o intervención de una potencia extranjera en México – dijo – ha quedado establecido en la Constitución, el siguiente texto: El pueblo de México, bajo ninguna circunstancia, aceptará interveneciones, intromisiones o cualqueir otro acto desde el extranjero que sea lesivo a su integridad, independencia y soberabía, tales como golpes de Estado, injerencia en elecciones o la violación del territorio mexicano, sea esta por tierra, agua, mar o espacio aéreo.
Esta reforma – puntualizó la mandataria – dice en pocas palabras: ¡México no acepta injerencismo, no acepta intervencionismo! ¡Somos un país libre, independiente y soberano!. RDM