Javier Peñalosa Castro
La semana que termina estuvo marcada por catástrofes de todo tipo, pero en especial por la de índole política que vivió la Cámara de Diputados, donde los integrantes del nuevo colectivo PAN-PRD-MC reaccionaron airadamente a la “jugada” del calderonismo de imponer a quien fuera el frustrado delfín de Felipe Calderón hace seis años como pastor de la Cámara de Senadores, a propuesta del PRI, y con la evidente intención de bajar a Ricardo Ricky Ricón Anaya de la contienda por la candidatura del PAN a la Presidencia de la República en 2018.
La movida estuvo aderezada con la insistencia del PRI en dejar como fiscal especial a modo al actual procurador Raúl Cervantes Andrade, para que cubra las espaldas a los involucrados en casos de escándalo como los sobornos de Odebrecht, las obras deficientes y a precio de oro encargadas a las constructoras favoritas (OHL, Higa, Prodemex) de Ruiz Esparza y la siniestra trama denunciada esta semana por el portal Animal Político, en la que se utilizó a un grupo de universidades y a mexicanos pobres que se prestaron para ser prestanombres, con el fin de defraudar miles de millones de pesos a distintas secretarías y dependencias federales, así como a empresas paraestatales como Pemex.
Esta grosera pretensión de imponer a Andrade a toda costa, y por un periodo de nueve años, a los próximos dos presidentes de la República fue censurada por partidos de oposición, organizaciones de la sociedad civil y hasta el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y la mismísima CNDH, que pidieron cancelas la posibilidad del “pase automático” e incluso pidieron la cabeza del procurador para facilitar la elección de una figura sin compromisos partidistas, con prestigio ciudadano y rasgos de independencia. Suena difícil, pero entre mantos millones de mexicanos, al menos una buena terna de personas probas, rectas y capaces habrá.
A estas manifestaciones se sumó el escándalo que se desató a raíz de la publicación de una nota periodística en la que se reveló que Andrade es dueño de un Ferrari que vale más de tres millones de pesos y que le tramitó placas de Morelos (expedidas con un domicilio falso) para ahorrarse el pago de la tenencia.
Tanto la evasión del pago como el hecho mismo de tener un auto tan lujoso agudizaron las críticas en redes sociales y entre los opinadores.
Finalmente el PRI tuvo que ceder a la presión de Ricky y sus nuevos amiguitos del PRD, Alejandra Barrales, y su nueva adquisición —con mañas más bien añejas—, Dante delgado, de Movimiento Ciudadano, y ofreció públicamente frenar el llamado “pase automático” de Cervantes para convertirse en fiscal general, aunque dejó abierta la puerta para que pueda figurar entre los aspirantes al cargo.
La jugada de los Calderón, respaldada con todo por los priistas tiene, sin duda, la intención de hacer a un lado al llamado “joven maravilla” para dar paso a Margarita Hillary Zavala, quien junto con su mínimo consorte pretende hacer realidad aquello de la “pareja presidencial” con que soñaba Martita Sahagún de Fox. En la lucha por alcanzar este sueño, hay quedado demostrado que nuestra Hillary puede prescindir de los escrúpulos y que es capaz de todo —incluso de aliarse con el PRI— con tal de lograr su propósito.
Mientras esto ocurre, Andrés Manuel López Obrador ha puesto mar de por medio y lleva a cabo una gira europea que, sin duda, le dará algún respiro ante los jaloneos que aún tienen lugar al interior de Morena, luego de que Ricardo Monreal no fuera favorecido con la designación como candidato a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, y que se ha mantenido en el “pataleo” más tiempo del que les hubiera convenido a él y a su partido. Igualmente polémica y criticada por la comentocracia ha sido la incorporación de la polémica pareja de Dolores Padierna y René Bejarano a las huestes obradoristas.
Mientras tanto, la avasalladora campaña post informe de Enrique Peña Nieto cobija al PRI temporalmente, pero el precario equilibrio logrado por la propaganda comienza a ser alcanzado por la realidad, expresada en manifestaciones contra del Presidente e incluso el lanzamiento de cohetones que el jueves provocaron daños a uno de los helicópteros que formaban parte de la comitiva presidencial en Oaxaca.
El sismo de 8.2 grados en la escala Richter que hacia la media noche del jueves sacudió al sur y centro de México causó graves daños en Oaxaca y Chiapas, pero especialmente en Oaxaca. Tras las manifestaciones de descontento del jueves, los asesores presidenciales aconsejaron que Peña Nieto se trasladara mejor a Chiapas, donde también el terremoto causó daños. Pero no por darles la vuelta habrán de cesar las expresiones de descontento.
Como hemos podido ver en este breve repaso, las desgracias parecen cernirse sobre México y los mexicanos. Contra los desastres naturales, no queda más que la previsión y la resiliencia. Contra lo que sí es urgente actuar es contra los depredadores que están minando seriamente el patrimonio nacional, comprometiendo el futuro y, más grave aún, poniendo en riesgo la estabilidad social, con un pueblo que comienza a dar muestras más que lógicas de hartazgo.