Por Alejandra Del Río
La relación México–Estados Unidos se ha erosionado enormemente en los últimos meses, gracias a la ola de redadas impulsada por el ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos) resultado de las nuevas políticas migratorias del gobierno americano, que en varias ciudades han sacudido a la comunidad migrante y elevado la tensión bilateral al máximo, esto aunado a los aranceles que entraron ya en vigor y la amenaza de taxar ahora a las remesas ha generado un profundo descontento en la comunidad migrante.
En respuesta a los multiples abusos a los derechos humanos de esta comunidad, surgieron protestas y manifestaciones en varias ciudades de la Unión Americana como Nueva York, Austin, Atlanta, Washington y Boston, todas ellas habían sido pacíficas, sin embargo desde hace ya una semana las manifestaciones en Los Ángeles, California, subieron de tono, comenzaron a enfrentar a las autoridades migratorias y a las policías locales y a volverse más violentas, a raíz de esto y en una clara violación de la soberanía estatal de California, el Presidente Trump envío a 4000 elementos de la guardia nacional y casi 700 elementos de la marina, llamó a los migrantes “Invasores extranjeros” “Una invasión y anarquía del tercer mundo” y continuó arengando contra la comunidad migrante, llamandolos narcos, pandillas, asesinos etc, tal como lo hiciera durante su campaña presidencial.
Como consecuencia, las protestas volvieron a escalar y terminaron en disturbios, quema de vehículos, saqueos a comercios y enfrentamientos serios con las autoridades, quienes a su vez respondieron violentamente: golpearon e hirieron a muchos migrantes, hicieron cientos de detenciones y utilizaron violentos metodos de dispersión como el gas pimienta y las balas de goma; el Gobernador demócrata Gavin Newsom, dijo que la movilización del ejército fué un gran error “como echarle gasolina al fuego”. Trump respondió llamando a las autoridades de California incompetentes y dijo que de no haber intervenido la Guardia Nacional y el ejército, los Angeles estaría en llamas.
La alcaldesa de los Angeles Karen Bass se vió obligada a declarar un toque de queda indsefinido desde hace dos días en el centro de la ciudad, debido a esta escalada.
También esta semana la Secretaria de Seguridad Nacional Kristy Noem hizo responsable a la Presidenta Claudia Sheinbaum por las manifestaciones, acusandola de incitar a movilizaciones cuando se planteó el impuesto a las remesas.
En efecto la Presidenta de México había en varias ocasiones amenazado con organizar movilizaciones pacíficas en contra de las medidas del gobierno de Trump, pero negó categoricamente que ella hubiera alentado actos de violencia.
En Nueva York este martes, miles de manifestantes marcharon en protesta por los acontecimientos de los Angeles y el trato a los migrantes a nivel nacional, entre las manifestaciones pacíficas, se llevo a cabo una ocupación en el vestíbulo de la Torre Trump que terminó en 25 detenciones a los manifestantes.
Los migrantes mexicanos que representan casi el 80% del total de los migrantes californianos y sostienen gran parte de la economía estatal, hoy tienen miedo incluso de salir a trabajar, ante la amenaza de deportaciones multitudinarias, de la escalada de arrestos de la agencia ICE y del peligro que enfrentan en las calles con militares entrenados para conflictos exteriores y mas de 4000 guardias nacionales, que llegaron con el mandato del Presidente norteamericano de limpiar Los Angeles de una invasión.
En un momento así, de complicado el Senador mexicano Gerardo Fernández Noroña, quien lamentablemente ostenta el puesto de Presidente del Senado, ha optado por la confrontación sonora en lugar de la mediación estratégica, elevando el riesgo de mayores sanciones y rupturas diplomáticas.
Noroña ha calificado estas redadas como una “cacería de migrantes”, argumentando que operativos que “más parecen intervenciones militares y dijo “Estoy muy orgulloso de la comunidad mexicana en Estados Unidos… tenían que alzar la voz”, aplaudiendo algunas de las mas violentas images de las protestas en Los Ángeles como la del hombre con la bandera mexicana en motocicleta atropellando practicamente a la policía, o la del hombre que ondeaba la bandera de México, sobre una patrulla cubierta de humo que había sido quemada con bombas molotov, ambos actos realizados por supuestos migrantes mexicanos, pero que se podía esperar de un agitador como Noroña, mas allá de sentirse feliz por la violencia en los Angeles que le permite tomar protagonismo y dar a conocer sus practicas de porro radical.
No contento con esto, Noroña se burlo del senador americano Eric Schmitt por su iniciativa para triplicar el impuesto a las remesas del supuesto 3.5 % que había logrado la presidenta Sheinbaum, a un 15% en la famosa BBB (The Big and Beautiful Bill Act) la iniciativa fiscal a la que Trump llama “grande y hermosa”, la respuesta de Noroña no fue una condena enérgica, ni una defensa estratégica de los migrantes, ni una posición institucional seria del nivel de la Presidencia del Senado Mexicano, ante un ataque directo de un senador xenófobo, fue una burla grosera transmitida en vivo: imitaciones, risitas y una teatralización ridícula del senador norteamericano, a la que Schmitt repondio diciendole que ahora pediri a que su arancel punitivo subia un 5% mas.
¿Se ríe, senador Noroña, de que un legislador extranjero pretenda castigar económicamente a los mexicanos más pobres del país? ¿Se ríe del esfuerzo de millones que limpian casas, construyen calles, recogen cosechas, lavan platos para enviar cada mes 200 o 300 dólares que sostienen a sus familias?
Esas expresiones, tensan aún mas la negociación con Washington, al sonar a reto más que a diálogo. ¿Qué mensaje envía al Congreso estadounidense el presidente de la tercera fuerza política en México? Mientras él exalta las protestas y se burla de los legisladores, en Los Ángeles miles se enfrentan al gas lacrimógeno, la Guardia Nacional y redadas masivas que separan y destruyen indefinidamente a mies de familias mexicanas.
Ya como colofón ante la indignación de activistas, oposición y medios, que pedian su renuncia, Noroña con la altivez y soberbia que lo caracterizan, la misma que obligo a un ciudadano a pedirle perdón ante los medios, salio a gritar en tribuna que el no se iba a ningun lado y que ahora se iban a tener que aguantar hasta que termine su periodo en la presidencia les guste o no.
¿La respuesta de la Presidenta Sheinbaum ante todo esto? un tibio “Que todo el mundo se serene, no ayuda en nada la confrontación”… en lugar de pedirle su renuncia y dar finalmente un ejemplo de como se debe de manejar un representante del gobierno de México de su nivel, estoica como siempre, la Presidenta aguanta todos y cada uno de los dramáticos errores del absolutamente ineficiente gabinete que le impusieron y que juega mas en su contra que a su favor.
Así las cosas la Presidenta tuvo que recibir al enviado especial del Secretario de Estado Marco Rubio,
Christopher Landau y al recien llegado Embajador de los Estados Unidos en México, que seguramente vinieron a tratar el tema Los Angeles, aunque también se mencionó en medios que le siguen presionando por la supuesta “lista Marco”, exigiendo que se entregue a los narco-políticos de los que se viene hablando hace meses.
Y como si esto fuera poco la Presidenta hace las maletas para asistir a la cumbre del G7 en Canadá, donde no solo tendra que dar la cara ante un Trump mas envalentonado y enojado que nunca contra los migrantes mexicanos, los carteles, las protestas y demás temas que seguramente le reclamarán, un detallito mas… esta reunión que se llevará a cabo en Alberta, del 15 al 17 de junio y viene justo después del cumpleaños de Donald Trump, fecha en la que el presidente norteamericano decidió además de festejar sus 79 años, que casualmente coinciden con los 250 años del ejército, con un macro desfile miitar que no vayan a pensar que es para intimidar al mundo… solo que al mejor estilo de Mariyn Monroe, decenas de comunidades migrantes, estan convocando a macro marchas por toda la unión americana para que le canten a Trump un velado –“Happy Birthday Mr. President ”- donde seguramente los mexicanos serán mayoría y abundaran los reclamos a todas las políticas del Presidente americano, claro que por esas funestas causalidades de la vida, Doña Claudia Sheinbaum, se va a tener que sentar a la mesa con el mandatario, justo al día siguiente de que litreralmente le “llueva en su desfile” a Donald Trump y se puede prever que la delegación mexicana saldrá bastante raspada de Canadá, francamente no quisiera estar en los zapatos de la Presidenta Sheinbaum la proxima semana ni de casualidad.