Eduardo Sadot
Es sintomático que el gobierno se empeñe en generar la opinión de que “no hay oposición” lo que campea en el fondo es la intención de desalentar a los mexicanos que reclaman, porque observan la descomposición del país y de las instituciones en el desmantelamiento de lo logrado en muchos años por los mexicanos, independientemente de partidos y gobiernos.
La estrategia evidenciada con la que ha llegado morena esta basada en el mismo método propagandístico utilizado por los nazis de Hitler y la Alemania Nazi de finales de la primera guerra mundial, Goebbels lo basó en repetir mentiras para manipular a las masas, hoy en México, posesionar una serie de mentiras desde la que afirma “ya no hay nada que hacer” y que “el pueblo ya decidió” “que MORENA es mayoría” “que la oposición no existe” “que la oposición está dividida” “la oposición esta pulverizada” que “la oposición esta desarticulada” que la oposición solo la componen el PRI y el PAN unificándolo convenientemente en el discurso en “los prianistas” y que el “prianismo no existe”.
Todo ese discurso que pretende descalificar a la oposición, anularla o negar su existencia, solo evidencia la verdadera debilidad del Partido MORENA que como respuesta, ha fortalecido los mecanismos de operación para consolidar los fraudes electorales. Una estrategia de bombardeo de nuevas noticias para minimizar las malas y disfrazar las evidencias de la mentira institucionalizada. Para borrar en el consciente colectivo las evidencias de mentiras y corrupción.
A pesar de las declaraciones, señalamientos, acusaciones y evidencias, un día sí y otro también de actores políticos como Alejandro Moreno, Ricardo Anaya, Rubén Moreira, Germán Martínez, Lili Téllez y mucho más, inclusive de la misma disidencia dentro del Partido MORENA la orden es: no existen, no están organizados, no tienen posibilidad de ganar una elección, ¡nada más falso! Si bien es cierto que están en proceso de reinventarse, que hay mucho camino por recorrer para el 27, lo que a MORENA le cuesta trabajo asimilar, es eso precisamente, lo que le obliga a la campaña que han promovido de “la oposición no existe” o “la oposición no es opción” pero de que hay una importante mayoría de mexicanos descontentos, con la destrucción de la nación eso es una verdad inocultable.
Para comenzar, la mayoría calificada, que se requirió para aprobar los cambios constitucionales esta viciada de origen, está falseada, porque un solo partido no puede tener solo la mayoría calificada y a pesar de que se presentan como partidos diferentes, a nadie engañan – salvo a sus propios fanáticos – porque la alianza es una máscara, por que todos son lo mismo, pero aún así no alcanzaron la mayoría y tuvieron que pervertir a cuatro senadores – tampoco eran unas blancas palomas – para alcanzar la mayoría.
El discurso de MORENA que versa sobre “somos honestos” está por descarrilarse, ha costado muchas vidas y sigue costando muchas más, proteger a los suyos y defenderlos a rajatabla, solo para mantener la mentira de que no son como antes, pero como ya sabemos todos ¡son y han sido peores! Porque solo piensan en mantenerse en el poder a cualquier costo, no les importa la eficiencia administrativa, rendir cuentas, respetar a la oposición, respetar los recursos humanos de México, ni de sus instituciones, del poder judicial por ejemplo, ni de los organismos autónomos, es más, ni de las fuerzas armadas, las están desmantelando para armar su “guardia nacional” para preservarse en el poder.
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