Por Mouris Salloum George
Las estadísticas y los discursos festivos sobre la ocupación laboral y la “recuperación” económica no cuadran con la cruda realidad. Los datos del INEGI, IMSS y Banxico, insisten en mostrar sus cifras alegres, quizás objetivas técnicamente y apegadas a sus propios modelos, pero alejadas de la realidad. Son “precisas”, pero parciales en el mejor de los casos o están sustentadas en modelos econométricos al gusto de los funcionarios, pero no al servicio de los ciudadanos.
El promedio de desempleo -según datos oficiales- en este gobierno es de 3.8% -contra 4.1% de Peña Nieto, y 4.7% de Calderón-.
Ese dato sería digno de aplauso. Sin embargo, sirvió de poco ante las presiones hacia el gasto de los hogares por la imparable inflación multifactorial de los últimos años.
En alimentos básicos el fenómeno alcista superó los dos dígitos, aunque en el promedio general el indicador apenas llegó al 8.0%, con tendencia a la baja en los últimos meses. Sin embargo, se trata de un dato muy engañoso, al mezclarse todo tipo de bienes y servicios que no consumen los sectores vulnerables.
Según INEGI, la actividad económica ya recuperó el nivel pre pandemia desde el tercer trimestre de 2022. Lo que no apunta es que en el año pre pandemia el país estaba en recesión técnica. También INEGI señala que la economía acumula seis trimestres consecutivos en “crecimiento”, pero básicamente menor al 1.0% anualizado. Ningún país “crece” con ese registro, que en los hechos es igual a estancamiento.
Según los datos del IMSS, los números de empleo y de patrones registrados en sus estadísticas ya recuperaron los niveles previos a la pandemia. De acuerdo, pero con una precarización de los puestos laborales (con sueldos más bajos).
Desde 2019, los trabajadores aumentaron las disposiciones de efectivo de sus ahorros en Afores. Al menos 430 mil cuentahabientes dispusieron un promedio de 14 mil 475 pesos de retiro por trabajador; casi el doble de lo registrado en los sexenios anteriores.
El aumento sostenido de las remesas es revelador. Estas alcanzaron cifras históricas, de 58 mil mdd en 2022; más de 52 mmdd en 2021 y de 48 mmdd en 2020.
Muy superiores al total de los dos sexenios previos. Autoridades migratorias de los Estados Unidos reportaron un aumento de hasta más de tres millones de paisanos que durante este gobierno emigraron hacia el país del norte, la mayoría de ellos deportados.
Al mismo tiempo, la economía informal en todo el país sigue expandiéndose (con precarización de las ventas). Desde antes de la pandemia, el ambulantaje se estableció en torno al 60% de la Población Económicamente Activa (PEA). Lo que se ve en calles de los barrios populares es que más gente ha caído en la informalidad.
El país sigue padeciendo una falta de responsabilidad y rigor metodológico de parte de los organismos mencionados. Toda administración sin un mapa de riesgos objetivo -por dura que sea la realidad-, pierde oportunidades de aplicar las medidas y programas adecuados para corregir lo que deba corregirse.
Una deuda pendiente para la próxima administración.