Col. Candelero
Abraham Mohamed Z.
Ayer 5 de Febrero, histórica fecha en que se conmemoró el 106 Aniversario de la Promulgación de la Constitución Política de México de 1917 en la Cuna de la Democracia que es el Teatro de la República en Querétaro, el furibundo, polarizante y autoritario presidente Andrés Manuel López Obrador recibió quizá la más fuerte lección que jamás le hayan hecho a su ego.
También tuvo que escuchar directamente el firme rechazo a su falta de respeto a la división e independencia de los Poderes que constitucionalmente debe guardar, porque así lo juró al recibir la banda presidencial.
Y fue ¡una mujer! Norma Lucía Piña Hernández, presidenta de la Suprema Corte de Justicia quien encabeza el Poder Judicial Federal, la que se atrevió a hacerlo con ejemplar dignidad personal en busca del respeto que se merecen todos los que conforman no solo el Poder Judicial –Ministros, Magistrados y Jueces- sino también los del Poder Legislativo -Diputados y Senadores- quienes tristemente, hay que decirlo, ya son la mayoría amanuenses del primer mandatario, quien por lo que se percibe, pretende seguir mangoneando a los mexicanos a su leal saber entender con la bandera de la Cuarta Transformación para el Bienestar de todos, negando por supuesto, que esto pudiera calificarse como dictadura.
También debes saber que es un engaño difundir que la Ministra Presidenta fue irrespetuosa al no ponerse de pie como la mayoría de los asistentes cuando AMLO ingresó al Teatro de la República, ya que ella sí se levantó de su asiento como muestra de respeto a la investidura presidencial al hacerse los honores de ordenanza para iniciar luego la solemne ceremonia conmemoración.
La Ministra sí cumplió con todos los protocolos de respeto al presidente de la República que ejerce el Poder Ejecutivo.
Es obvio que ella, quien encabeza el Poder Judicial no podría quedar en evidencia negando el respeto que le reclama al Ejecutivo.
(Por cierto, nomás para que “liques y califiques” debes saber que la Ministra Piña y el panista Santiago Creel, presidente de la Directiva de Cámara de Diputados aborrecido por los lacayunos morenistas, fueron sentados al final de la mesa del presidum conmemorativo).
¿Y QUE DICE EL PRESIDENTE?
Con su característica parsimonia chorera, el señor presidente, al comentar en “su mañanera” que la señora Ministra se hubiese quedado sentada cuando él ingresó al Teatro de la República, dijo que “tal vez estaba cansada o no quiso pararse para recibirlo”, pero que ese gesto le daba mucho gusto y lo llenaba de orgullo porque eso no se veía antes cuando los Ministros eran empleados del Presidente “y eso demuestra –presumió- que estamos haciendo un cambio, que existe una verdadera división de Poderes y que en México no hay una dictadura”.
Eso soltó AMLO, pero su vocero Jesús Ramírez, por las redes sociales acusó a la presidenta de la Corte de no respetar el protocolo por no recibir de pie al señor Presidente de la República al llegar al Teatro de la República.
Esto escribió el vocero presidencial en Twitter sin referirse a ella: “En el acto del 106 aniversario de la Constitución mexicana fuimos testigos de la vitalidad de nuestras instituciones con un debate de ideas entre los representantes de los tres Poderes de la Unión. Resulta desafortunado que no todos respetaron el protocolo de la ceremonia”, publicó en Twitter.
Aquí tienes lo que expuso la Ministra Piña:
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