La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
No hay acusación que se sostenga ante una video revelación
El pasado 01 de agosto, se realizó la Consulta Popular en la que preguntó a la ciudadanía, palabras más, palabras menos, si estaban de acuerdo en que los ex presidentes fueran sometidos a juicio, YSQ, principal promotor de la misma, recomendó votar por el NO.
Su argumento para tal sugerencia, radica en afirmar que él ‘no es hombre de rencores’. Así pues, con una participación de aproximadamente 7.11 % (6.6 millones de votantes) y 97.72 % de respaldo al «Sí» (6.5 millones), el proceso se fue al archivo, por no lograr el porcentaje de participación (40% del padrón electoral), necesario para ser vinculatorio.
Hasta aquí todo perfecto, el presidente López Obrador se quitó la presión popular de encima y evitó abrir frentes con los tlatoanis idos, sobre todo, con su antecesor, a quien nunca tocaba con ningún comentario ofensivo en ‘las mañaneras’.
La pregunta es: ¿qué cambió para que se abriera una indagatoria contra Peña?
El olfato político indica que, más que buscar sancionar al toluquita por sus corruptelas, sólo le estarían dando un calambre por una sencilla razón: lo quieren fuera del proceso electoral del EDOMEX.
En las semanas previas se ha documentado, que don Enrique ha sido anfitrión, en su casita madrileña, de ex gobernadores de su estado natal, de miembros del grupo Atlacomulco, de un diputado panista que quiere ser candidato de una alianza PRI-PAN-PRD y hasta se dice que habría platicado con ‘el innombrable’, que anduvo por aquellos lares.
El motivo del tal activismo, tiene como objetivo que, el gobernador Alfredo del Mazo, no entreguen la plaza a MORENA, como lo han hecho otros mandatarios, a cambio de una chamba como diplomáticos. No nos hagamos bolas.
Claro, es una especulación, pero en honor a la verdad, el tabasqueño es de ‘moditos’ firmes, no le gusta improvisar. Un contexto demasiado obvio, para no inferirlo.