Ante senadores, el subsecretario Hugo López-Gatell, subestimó la necesidad de instalar el Consejo de Salubridad General, “porque de nada sirve”, buscando un tono convincente ante “viejos lobos de mar” ahora convertidos en senadores.
Redacción NoticiasMX.- Fuera de la norma y con una notoria influencia de la decisión presidencial, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell, compareció en el Senado de la Repúblca este martes, asumiendo decisiones de un órgano principalísimo de la función del Poder Ejecutivo: el Consejo de Salubridad General, señalado por la propia Constitución General de la República como la primera autoridad sanitaria de este país, por encima incluso de la Secretaría de Salud y que depende, por mandato no sólo de la Carta Magna, sino de la Ley General de Salud, del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, sin intermediario alguno, según reza la redacción de dicho ordenamiento principal:
Ley General de Salud
ARTÍCULO 4o. Son autoridades sanitarias: I. El Presidente de la República;. II. El Consejo de Salubridad General;. III. La Secretaría de Salud, y. IV…
Y es que López Gatell, ante el reproche y la exigencia justificada de los legisladores en esa reunión, de que se instale a la brevedad el referido Consejo General de Salubridad, el epidemiólogo divagó sin pena ni gloria “de una maroma a otra”, tratando de “sacarle la vuelta al tema” de la urgencia y la irresponsabilidad en que está incurriendo el Primer Magistrado de la Nación, al no instalar, por “capricho o por ignorancia”, el referido órgano del Estado Mexicano que tiene como mandato, emitir disposiciones obligatorias en materia de salubridad general.
No es el subsecretario López-Gatell la autoridad máxima para decidir si se instala o no. De hecho la Ley General de Salud señala al secretaro de Salud como su Presidente Ejecutivo, en este caso el Doctor Jorge Alcocer Varela, que se encuentra desentendido de cualquier tema alusivo a la emergencia.
En esencia, se hace lo que el presidente López Obrador dice, aún cuando es un tema urgente que debe ser ajeno a criterios político-electorales o de capricho o vendetta política. López-Gatell sólo representó y “ejecutó la instrucción del Presidente” frente a los senadores.
Situación que motiva a la preocupación, por cuanto el poder hoy más que nunca en México, no puede ejercerse bajo los criterios de transmisión de forma líneal o vertical de la autoridad.
Hoy, ante la escasa preparación técnica de un presidente, sea el que fuere y del signo electoral o ideológico que sea quien llegue al cargo, debe estar acotado por un cuerpo de asesores en cada materia, pues el Presidente no necesariamente lo sabe todo.
Y hasta para estar en concordancia con el “concepto democrático y colectivo” de la izquierda a la que dice pertenecer López Obrador, hoy más que nunca en México, el poder debe practicarse en un plano horizontal, directo, entre iguales… pues no son los políticos ni los administradores nuestros “jefes supremos”.
Por otra parte, en el Senado mexicano, el espacio idóneo de la política, donde conviven muchos individuos con la experiencia y la estatura político-moral, para cuestionar al novel funcionario que, aunque experto en temas epidemiológicos, no posee -aunque quisiera- los conocimientos y el bagaje en la materia política, financiera y hasta de planeación, como los que muchos senadores sí tienen, pues han sido gobernadores, funcionarios al más alto nivel y miembros prominentes de la sociedad.
Uno de ellos, Dante Delgado Ranauro, le reprochó deliberadamente de ir al Senado a pretender “hablarles de todo, menos de salud pública”.
Mostró el funcionario la orden dada por su jefe, de “darles atole con el dedo” a los senadores... según él.
Otros legisladores más, provenientes del PT-PES-PVEM, aliados incluso de Morena y el presidente, su jefe, se unieron para pedir declaratoria de emrgencia y la consecuente instalación del citado Consejo General de Salubridad (CGS), a lo que se negó sistemáticamente el funcionario de Salud, “montándose en su macho”, como lo señalan akgunas crónicas.
Pretende mostrarse como un hábil operador cuando su responsabilidad más sustantiva no es esa, precisamente… pretendió pues “venderles chiles a Clemente Jacques”, el martes en el Senado (frente a los senadores).
La noche de este miércoles, aun cuando del Ejecutivo salía la negativa a instalar el CGS, se accedió a instalarlo la tarde de este jueves 19 de marzo, alrededor de las 17 horas.
Habría sido la presión de todos los sectores de la sociedad, los que obligaron moralmente al Presidente López Obrador a reconsiderar su postura y actuar dentro del cauce legal.
Se habrían incluso presentado por legisladores de oposción en ambas cámaras, pronunciamientos de solicitud de Juicio Político al Presidente, por la asombrosa irresponsabilidad fundada en el capricho, según las diferentes intervenciones verificadas en el Congreso de la Unión, de las que ha hecho gala el titular del ejecutivo en algunos temas como el manejo de la contingencia provocada por el coronavirus.
Así que este jueves, a las 17 horas, se instalará por fin el Consejo General de Salubridad. Un tema de seguridad nacional, más que de salubridad, a como viene el problema pandémico.
hch