Largos años de luchas políticas e ideológicas han transcurrido en nuestro México para pretender lograr en su vuelo y en su suelo la gobernanza más eficaz y más justa. Nuestra Patria no tuvo suerte ni con el neoliberalismo, ni con la Cuarta Transformación de la Nación para obtener ello. Esas luchas fracasaron rotundamente en ambas ocasiones en los ideales de justicia y saneamiento de los recintos en donde se procura e imparte. Se extraviaron los presidentes y sus funcionarios en ambas épocas para lograrlo, esa desviación se debe a la corrupción que conducía el esfuerzo para combatirla. Pobre Justicia. Pobre Nación.
En éste año de elección presidencial todavía no parece que ello vaya a mejorar, la Academia de Derecho Penal del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, A.C., no observa que sean retomados los principios torales de nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, todos los abogados percibimos con desconcierto la amenaza de nuevas injusticias y de nuevos retrocesos provocados por la próxima contienda electoral, por esa lucha en que realmente no existe interés alguno por mejorar la justicia, sólo se da el contexto de ambicionar el poder.
Las injusticias y corrupciones del neoliberalismo y de la Cuarta Transformación de la República, han afirmado la voluntad de la abogacía independiente para obtener un cambio, esas togas ahora son conscientes de la estrecha solidaridad que se requiere y que nos obliga a impedir que se siga envileciendo la justicia y pisoteando a nuestra Carta Magna, cualesquiera que sean los intereses de esos políticos en dichas contiendas para obtener el sitial de presidente de los Estados Unidos Mexicanos. La abogacía independiente de la Nación, exhorta a esos postulantes que sobrepongan a sus intereses, los intereses e ideales de nuestro Pacto Federal.
En todo el territorio nacional existe una inquietud para obtener seguridad y justicia, ello es una prueba de las antepuestas afirmaciones. La próxima lucha electoral despierta en toda la República el anhelo de justicia y respeto a nuestras leyes. Nunca, como ahora, se requiere un cambio de actitud política que interese a la mayoría a una conducción para mejorar la legalidad y fortalecer nuestro Estado de Derecho.
Por profunda que sea la confronta para elegir a nuestro próximo gobierno, por muy divididos que nos encontremos unos de otros, debemos de tomar en cuenta los principios torales de nuestra Ley de Leyes para obtener ese cambio y mejorar esos tópicos.
Es cuánto.
Lic. Alberto Woolrich Ortíz
Presidente de la Academia de Derecho Penal
Del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, A.C..