La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Con base en el IQ tropical: ¿quién es más inteligente? ¿las ‘corcholatas’ defeñas o la tabasqueña?
Cuando Adán Augusto López, asumió la titularidad de la SEGOB, en agosto de 2021, se pensó que por fin se haría política de altos vuelos, en este caso, nos referimos a la construcción de consensos con la oposición, tenía el perfil de un funcionario sereno, analítico y con harta urbanidad en su trato.
Y, en efecto, el tabasqueño se condujo con civilidad durante un buen tiempo, fue un interlocutor válido con gobernadores y líderes partidistas, sin embargo, en un momento determinado, pareció dar al traste con el hombre de las finas formas, para dar paso al señor Hyde, que no duda en endilgar todo tipo de epítetos a los adversarios del régimen.
El quiebre, en la personalidad del personaje, se da en el momento que su patrón, paisano y socio de vivencias, lo postula como la tercera ‘corcholata’ en la contienda presidencial, lo cual, con todo el poder que le fue otorgado, altera el escenario sucesorio y se plantea el viejo dilema: la hija (creación propia) o el hermano (vida paralela).
Decíamos, en colaboración anterior, que uno de los retos de la 4T para el 2024, es como transfundir la popularidad de AMLO (que es su principal bono electoral), a la o al candidato y, quizá, en este contexto, la estrategia sea ‘buscar parecerse’ a YSQ.
Es difícil encontrar información, en la que Marcelo Ebrard, aparezca haciendo declaraciones rijosas, Monreal por el estilo, sin embargo, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, se suben al ring y como buenos fajadores, hacen gala de la retórica incendiaria, tal como lo ha hecho López Obrador, a lo largo de su trayectoria.
Cosas de la vida, el asunto es que Claudia, ni se apellida López ni tiene acento tropical.