DIARIO DE ANTHONY
11:32 a.m. Afuera, el mundo lucía DESTRUÍDO. O, más bien así era como aquel pobre joven lo percibía. Sus sentidos, débiles desde nacimiento, jamás habían podido soportar mirar tanta inmundicia, tanta pobreza, y tanta miseria humana.
Había nacido en un país muy increíble, un país, que como él, jamás lograría saber su verdadero origen, es decir, el por qué había nacido chingado. Toda una vida se lo había pasado, indagando, reflexionando, cuestionándose muchos por qués respecto al asunto.
Afuera, el mundo ya estaba destruido: esto era todo y lo único que él sabía. Lo demás, cual espectros de su dolor, seguían torturando de noche y de día. Ah, ¿cómo transitar a través de todo un día entero? Por cada día más que venía, él, junto a su alma, sentía ya no soportarlo más.
“El mundo, ¡el maldito mundo se ha destruido!”, decía y se repetía, cuando miraba a los demás estar sin inmutarse por lo feo que era la vida misma. “¿Cómo entonces el resto que de mí queda sobre esta tierra?”
Ah. Aquel joven no dejaba de pensar en lo hilarante que eran algunos humanos que en su momento él dizque había “admirado”. Qué triste le resultaba todo ahora. Aquel hombrecito, pensaba, se había convertido en un payaso, en un payaso de la vanidad y el narcisismo…
Dearest one… Volviendo a la realidad. Pain in the head. Hard to deal with… No sé qué decir. Ayer he terminado un cuento nuevo. Y, no sé nada más al respecto. Tal vez, muy en el fondo de mi mente, anhelo, ah… “venderlo”. Ilustrar toda la historia para después MANDARLA AL MUNDO, a todos los niños… para que así conozcan la historia de aquel niño, a quien he puesto por nombre: Journey.
Me siento muy mal ahora mismo. Siento un dolor horrible aquí detrás de mi nuca. Ah. Tal vez y me dé no sé qué. ¿Una parálisis? Imposible. Afuera, el mundo está destruido, y a mí se me hace muy difícil seguir soportándolo. Y, no diré más por el momento. El cuento ya está listo. Veré qué día lo mando a INDÍCE POLÍTICO…
A. SMART
Agosto/22/2019