* García Villanueva tropezó en su propia trampa
SILOGISMOS
Por Antonio Ortigoza Vázquez/@ortigoza2010
Cuando un político pueblerino se siente personaje de las intrigas florentinas de la familia Médicis, corre el peligro de resultar como El alguacil alguacilado. En lenguaje llano: hacer doble juego en la política no es para cualquiera, sobre todo si no se dispone del talento necesario para aprendiz de Maquiavelo.
Así le sucedió al dirigente estatal del PAN en Hidalgo, Cornelio García Villanueva, quien ya como suplente del candidato a diputado plurinominal, tuvo la intención de “darle esquinazo” y quedarse con la candidatura propietaria, quiso manipular nada menos que al líder nacional panista, Marko Cortés, utilizó a su ex esposa y al asesor jurídico de otro candidato a diputado local.
Todo le resultó al revés, como en los hilarantes Entremeses Cervantinos.
Sucedió pues que Cornelio sintió que la suplencia no estaba al nivel de su puesto de dirigente estatal del blanquiazul. Se dedicó a “cultivar” al líder nacional Marko Cortés para “venderle” la idea de destituir al propietario del séptimo lugar plurinominal al Congreso federal, Jovani Miguel León Cruz, ex alcalde de Tlaxcoapan.
Para el caso comenzó a intrigar contra su compañero de fórmula y en complicidad de Jessica Badillo Borbolla, consejera estatal panista, hizo movimientos en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para que, mediante un “juicio ciudadano”, Jovani fuera depuesto y que le sustituyeran con él mismo como nuevo candidato propietario.
Para el caso, se valió también de los contactos de su ex esposa, Claudia Lilia Luna y de Rafael Sánchez, asesor jurídico del candidato a diputado local, Asael Hernández Cerón. Toda una combinazioni al estilo del Cardenal Mazarino. O al menos, así lo pensó Cornelio.
Pero Marko Cortés no es líder nacional por casualidad: se olió de inmediato los burdos manejos del dirigente estatal y tomó cartas en el asunto, antes de que enredara con sus intrigas el ambiente político en Hidalgo, de por sí muy caliente.
Finalmente, el ex alcalde de Tlaxcoapan fue ratificado como candidato.
Muy molesto por el fracaso, García Villanueva, se desentendió de las campañas del PAN con la coalición “Va por México” y comenzó a golpear al candidato a diputado local Asael Hernández, por medio de otro candidato plurinominal, Iván Francisco Becerra Cortés.
Pero Cornelio no logró que las decisiones tomadas se movieran un milímetro, Jovani y Asael se mantienen firmes y él, y su ex esposa Lilia, siguen como simples suplentes.
El corneado Cornelio se quedó con un palmo de narices y con el líder nacional de su partido muy furioso por sus triquiñuelas típicas de sociedad de alumnos de preparatoria.