Yo Campesino / ¿Mafias?
• El que se lleva, se aguanta. Lo del hijo, preludio de lo que se espera
*Miguel A. Rocha Valencia*
Más allá de lo reprobable que resulte hacer mofa de cualquier persona, en especial si se trata de menores de edad, lo sucedido en días pasados con el hijo del ganso, marca el preludio de lo que en este espacio comentamos hace más de un año, por aquello de “quien siembra vientos recogerá tempestades”.
Tormentas que, a lo largo de estos años, se ha encargado de sembrar, abonar y atizar el profeta de la 4T, quien, sin recato alguno, ofende, acusa y condena en cadena nacional, todas las mañanas a quien le place, no coincide con él y se atreve a contradecirlo, incluso si son del mismo establo: el más reciente, Porfirio Muñoz Ledo.
Este hecho no es nuevo, el mesías tropical cultiva el arte de ofender, acusar y condenar desde que era candidato en su primera campaña donde el “villano favorito” era el innombrable Carlos Salinas de Gortari al cual dejó de acusar como jefe de la “mafia en el poder”, desde que el mismo tlatoani olmeca asumió el poder, desde donde endereza sus baterías contra Felipe Calderón, quien ahora es el culpable de todo.
Incluso, el expresidente Michoacano parece estar detrás del fracaso de la 4T, de él según el actual mandatario, recibió la “herencia maldita” de un país semidestruido y hoy convertido en ruinas, incluyendo una guerra que dejó en todo ese sexenio de horros cercade 90 mil asesinatos y que hoy con abrazos y no balazos, está cercano a los 125 mil homicidios dolosos en menos de cuatro años sin conflicto bélico.
En el intermedio, arremetió contra la “chachalaca” Vicente Fox y luego contra los hijos de Martha Sahagún y la misma exvocera presidencial. Se regodeó en los apodos y críticas contra el guanajuatense quien hoy le dice “aguántese”.
Además, cuando el caudillo de Macuspana habla de límites entre mafias, refiriéndose a que entre ellas se respeta a la familia, parece olvidar que “gracias” a la impunidad de los criminales durante el presente sexenio, hoy hay más asesinatos de mujeres y niños que en “otros tiempos”. Son cerca de 40 mil féminas y menores de 18 años los abatidos durante el cuatrienio.
Con la agravante de que el secuestro de niños y mujeres aumentó ya sea con fines de explotación sexual directa o para incrementar los ejércitos del crimen organizado ante la expansión territorial que está en boga. Claro entre esas víctimas hay profesionales que sirven para la logística de las empresas criminales, incluyendo contadores, abogados, médicos, ingenieros y muchos, pero muchos militares y policías.
Pero si se trata de lo que el ganso llamó en su momento la mafia en el poder, no debe olvidar que él encabeza la actual. Antes había corrupción e impunidad, claro, pero cuando alguien era denunciado tan claramente en público, rodaban cabezas, incluso de gobernadores. Hoy la violación a la Constitución inicia desde Palacio Nacional y se extiende al gabinete legal, ampliado, a los familiares cercanos y en segundo grado, y nadie, absolutamente nadie es perseguido.
Y es que la actual mafia está protegida desde Palacio Nacional. Basta mostrar como pidió el profeta “obediencia ciega” y con ello es suficiente para revestirse de impunidad. Están los hermanos, las cuñadas, yerna, tía, compadres, amigos de correrías contra quienes lo menos que podría imputárseles, sería manejo de dinero de dudosa procedencia. Existen los videos, audios, escritos y toda clase de pruebas contra ellos.
Los delitos electorales se dan a todos los niveles, insistimos, desde el mismo corazón del poder, donde el tráfico del mismo es reiterado. El caso más emblemático además del propio machuchón, el del hijo de nazi de los pies fríos, Alejandro Gertz Manero quien utiliza la Fiscalía para sus venganzas personales mientras la delincuencia federal permanece impune.
¿De qué mafias habla el jefe del Ejecutivo? ¿De la que vende materiales militares a la delincuencia organizada? ¿De la que no rinde cuentas de miles de millones de pesos en contratos entregados a “empresas” fantasma? O a aquélla que bajo el cobijo de una política de seguridad inexistente entregó casi la mitad del territorio nacional al crimen organizado, incluyendo vidas y haciendas.
Si, hay de mafias a mafias, pero algunas como las de hoy, gozan de total impunidad, tal vez porque son de casa y a esas en vez de persecución y cárcel, se le dan abrazos, aunque para ello se deba someter al poder Judicial encabezado por la Suprema Corte, donde el repudiado hijo de la Libre de Derecho, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, se suma a la causación abierta de su patrón de Palacio para acusar a jueces de corruptos, sobre todo si contravienen sus caprichos.