La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
El linaje les viene por comer galletas ‘Emperador’ y bajárselas con ‘coronita’
Estableciendo una analogía, así como los empresarios son la clase dominante en los medios de producción, la clase política hegemónica tiene, paras sí, el control de los mecanismos (incluidas las triquiñuelas) que, en su caso, le permiten continuar en el poder.
En este sentido, Marx consideraba que ‘la clase social dominante organiza la sociedad para proteger sus privilegios, y para ello se vale del Estado’, lo que en otras palabras refería AMLO, como la alianza entre el gobierno y el poder económico.
Así pues, no obstante, ser militantes de ‘izquierda’, muchos ediles buscan ‘heredar’ el cargo, usando la infraestructura municipal y, desde luego, de ser posible, con la complicidad del partido, o sea: buscan proteger sus privilegios y se valen de su propio poder como gobernantes.
Y, justamente, el fenómeno se da en los municipios, porque suponen, los nuevos mirreyes que, entre tantas demarcaciones, nadie se dará cuenta de sus maniobras, total, hay alrededor de 2500 ayuntamientos: ¿quién se va a fijar en lo que pase en San Pedro de los Saguaros?
Esta actitud abusiva, va en contra de los fundamentos ideológicos de la izquierda, más bien, tiene su origen en el derecho de sucesión monárquico que consiste en ‘heredar el cargo’ a un pariente (novias, novios y ‘guachomas’, son considerados en este rubro).
La conclusión, radica en que MORENA, PVEM y PT, acordaron definir las candidaturas a