Tiene copado al Presidente de la República.
Mueve los hilos del “caudillo” a su antojo.
Es su personaje principal.
El sexenio, para él, es otra de sus telenovelas.
Secretarios del despacho presidencial, consejeros, asesores…
…sólo son personal de reparto.
El guion es mero entretenimiento:
Que no hay silla para la “no primera dama”.
Y todos los comentarios giran en torno a ello.
No en lo insustancial del enésimo Informe.
No, ¡por Dios! De eso no.
Que AMLO pida que le toquen “Los Caminos de la Vida”.
Y así se soslayen los temas del hambre, la enfermedad y la muerte.
Todo para entretener y bailar al respetable.
Que “las mentiras de la semana”.
Para que no se toquen como tema las mamadas de todos los días.
En las mañaneras, incluso, “sugiere” temas a través de una tablet.
Sí, que está sobre el atril donde el tabasqueño reposa los brazos.
Por eso, además, el lento hablar.
Porque le echa un ojo al gato y otro al garabato que le envía el autor.
El guionista.
El productor de la telenovela:
¡Epigmenio Ibarra!
Despareció el CISEN, pero…
De origen guatemalteco, Ibarra sí sabe para qué es el poder.
Como un Fouché tico, alimenta con información la franja de ese poder que AMLO le ha dado.
Tiene lo que él llama “centros de inteligencia” repartidos por toda la geografía nacional.
Principalmente en los centros de toma de decisiones.
Y sus intervenciones y escuchas telefónicas no dejan exentos a los secretarios del Despacho presidencial ni a los consejeros ni a los principales colaboradores de López Obrador.
Graba y le transcriben, también, lo que dicen los opositores.
Los gobernadores.
Y los empresarios.
Obvio, también algunos periodistas.
No hay aparato ni software de última generación para espiar, para intervenir comunicaciones que él no posea.
Y que no use.
Porque, además, tiene padrones oficiales de casi todo.
Del SAT… del INE… del IMSS…
Por supuesto, también tiene sus “granjas de bots” que replican lo que él ordena en base a la “inteligencia” obtenida de sus centros de espionaje.
También refuerza con tweets y feisbukazos los dichos y dicharachos del “caudillo”.
Y ataca a quienes para él y para AMLO son fifís, opositores y adversarios.
A quienes ya espió.
A quienes tiene audiograbados y hasta videograbados.
Hombre del poder, también sabe utilizar los dineros… públicos.
Como esos del “préstamo” de 150 millones de pesos que le otorgó Bancomext.
O los adeudos al SAT que le fueron condonados.
Y los del IMSS…
Y…
Por eso es de temer.
¿No cree usted?
Indicios
Remover la estatua de Cristóbal Colón forma parte del guion que a diario pone en práctica el multicitado Epigmenio Ibarra. Periodistas de los medios de comunicación, influencers de las redes sociales, caricaturistas, lo mismo que habitués de los cafés y desayunaderos lo convirtieron en tema o trending topic. Muy entretenidos que nos trae, ¿o no? * * * Con respecto a la anterior entrega, El “big bisne” de “Andy” López Beltrán, he recibido múltiples comentarios en los que me dicen que no es Andrés Manuel Jr., sino que son José Ramón y su compañera Carolyn los del negocio de importación –¿y contrabando?– de combustibles. Pero mis fuentes me reiteran que Jota Erre, como le gusta ser llamado y como ya se escribió aquí, está dedicado solamente a il dolce far niente o, en español, el dulce hacer nada. * * * Y por hoy es todo, me despido no sin antes desearle, amable lector, que como siempre haya ¡buenas gracias y muchos, muchos días!
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