Desde Filomeno Mata 8
Por Mouris Salloum George*
Prácticamente, desde finales del sexenio de Felipe Calderón, críticos de la gestión privatizada de los fondos para el retiro de los trabajadores, empezaron a advertir que la bursatilización de esos recursos se prestaría a manejos turbios.
En el actual sexenio, en que las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) han acumulado más de tres billones de pesos, la advertencia se tradujo en hechos: El gobierno federal ha girado contra esos recursos papeles de deuda. Le siguen los corporativos privados, incluyendo firmas extranjeras.
Todo opera al través de la Bolsa Mexicana de Valores, a la que acuden entes públicos y particulares a fondearse incesantemente. Uno de los esquemas más socorridos, es el de los llamados Certificados de Capital de Desarrollo (CDK, de los que en Voces del Periodista ha dado cuenta siguiendo las triangulaciones internacionales con las que se financian algunas empresas de energía trasnacionales.)
Coparmex exige “explicaciones contundentes”
De tal magnitud es la permisividad en la operación de esos fondos, que hasta la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex, que preside el empresario Gustavo de Hoyos) ha exigido explicaciones contundentes sobre el asunto.
Coparmex, como una de las grandes empleadoras en México, asume parte del pago de cuotas tanto por concepto de Seguridad Social como por el de vivienda.
El tema surgió a raíz de que se hizo público que la empresa ICA, desde hace meses en concurso mercantil, logró resarcirse financieramente recibiendo recursos de Pensionissste, administradora que gestiona fondos de ahorro para el retiro de la burocracia federal.
Lo asombroso es que, puesto a flote el caso de ICA, una empresa en tesitura de quiebra, la administradora del ISSSTE asegure que, en la primera década de operación, ha captado utilidades 300 por ciento por arriba de otros esquemas “más conservadores”, término que se refiere al nivel de riesgo.
Quién sabe si los trabajadores del sector público federal tengan registro en sus estados de cuenta de esos fabulosos rendimientos.
No es de especularse si ese expediente abrirá la Caja de Pandora de ese descomunal negocio que dirige la Comisión Nacional del Sistema de Fondos para el Retiro.
Lo que sí es digno de destacarse es un documento que hizo público ICA para salir al paso al debate que ha generado su involucramiento en el asunto.
Hasta beneficiarios de las operaciones se enteran después de su ejecución
En el punto 1 del texto, la constructora empieza por sostener: Nunca fuimos informados de la compra de acciones en la Bolsa Mexicana de Valores, por la operadora financiera del ISSSTE.
Las empresas que cotizan en el mercado especulativo, no tienen control sobre las personas o instituciones que adquieren sus respectivas acciones, ni la emisora se benefician de los valores de compraventa al ser transacciones que se implementan vía BMV. De hecho, ICA se enteró de esa operación después de su ejecución.
En el punto 3 se afirma que personas e instituciones que adquieren acciones en la BMV tienen acceso a la información disponible, conforme la normatividad aplicable. Cada persona o institución es responsable de sus decisiones de compraventa de acciones y de su resultado.
Lo que nos revela esa explicación, es que los fondos de ahorro para el retiro de los trabajadores, están expuestos a la mano invisible del mercado. Es un decir.
Si los beneficiarios del usufructo de los recursos pensionarios sólo se enteran de las operaciones a que son expuestos hasta después de su ejecución, ¿cómo esperar que los dueños de esos fondos sean informados oportuna y verazmente de su trasiego y sus rendimientos?
Ese es un caso para Kalimán, pues los secretarios de Hacienda y los titulares de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores no son capaces de decir esta boca es mía. Cosas de la transparencia y la rendición de cuentas.
*Director General del Club de Periodistas de México, A.C.