Día Hábil
“Está muy violenta la entrevista”, parte 2.
Claudia Sheinbaum Pardo exhibió de nuevo su intolerancia, su carácter irascible, su autoritarismo, la noche del lunes en el programa Tercer Grado de Televisa.
Fiel a su estilo impositivo, la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México calló a todos los periodistas las veces que quiso e impuso su verdad… y su mundo ideal.
No la verdad que todos conocen o que muestra la realidad.
Igualito que cuando en Tabasco se molestó con un periodista porque le hizo preguntas contundentes, como “¿quién colocó tantos espectaculares para apoyarla en todo el país?”, a lo que ella contestó:
-Oye, ¡está muy violenta la entrevista!
Y eso que sólo es candidata, ¿se imagina si gana la elección del 2 de junio y llega a ser presidenta?
Le dolió el desplegado de los 250 intelectuales a favor de Xóchitl Gálvez Ruiz que se firmó el lunes y lo descalificó.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador acabó con la cultura, recortó toda clase de apoyo al cine, al arte y cerró las becas para estudiantes del Conahcyt.
Y habla del riesgo de fraude ¡de la oposición!
Como si no fuese histórico que el gobierno, el poder, sea el que planea, arma y ejecuta los fraudes electorales.
En el colmo del cinismo o en el cinismo extremo, alerta a la población en torno a una eventual operación para evitar que arrase por 20 o 30 mil puntos, como señalan las encuestas -según ella – y pide, suplica, salir a votar el 2 de junio, porque la oposición no está amarrada de manos.
Claudia es una sinvergüenza.
Porque no reconoce que la estrategia para enfrentar al Covid fue un fracaso, pese a que era mejor que la del gobierno federal, el de su amo, Andrés Manuel López Obrador.
Porque en seguridad niega lo evidente: los 186 mil ejecutados, más que ningún otro presidente en la historia y porque dice que no se ha militarizado al país, cuando al ejército se le utiliza hasta para pintar casas.
Porque defendió al cínico e impresentable ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
Y porque acusa que la oposición compra el voto, pero ni por error dirá que Movimiento Regeneración Nacional (Morena) lo compra con 922 mil millones de pesos este año repartidos entre 28 millones de familias.
¿Lo imagina?
Esos 28 millones son eventuales votos para Morena.
¿Entonces en qué quedamos?
¿No que tienen 30 mil puntos arriba en las encuestas?
Porque, de ser cierto, entonces es mucho pancho para evitar que los opositores vayan a dar la sorpresa o, como se dice en el argot de las carreras, “caballo que gana, alcanza”.
Así lo han hecho siempre.
Por cierto, ninguno de los periodistas en la mesa de Tercer Grado tocó, siquiera, la caída de la Línea 12 del Metro donde murieron 27 usuarios, en el gobierno de Sheinbaum en la CDMX.
¿Lo prohibió?
Seguro para que no estuviera tan violenta la entrevista.
Vámonos: ¿Y si Cruz Azul y Xóchitl hacen la chica?
alberto.montoya@diahabil.com.mx @albermontmex