Ricardo Del Muro / Austral
La presidenta Claudia Sheinbaum recomendó a los políticos que buscan relevar en el cargo a familiares en gubernaturas o presidencias municipales que “esperen” otro periodo, ya que “a la gente no le gusta el nepotismo”.
“Están jóvenes, que se esperen a otro periodo”, dijo en dos ocasiones en su conferencia matutina del jueves a los aspirantes (en especial los senadores morenistas Félix Salgado Macedonio y Saúl Monreal, así como a la senadora del PVEM, Ruth González), que habían celebrado la modificación de la iniciativa original contra el nepotismo que establecía su entrada en vigor para los comicios de 2027 y no hasta 2030, como intentaron ampliar el plazo.
Ha sido una postura firme de la presidenta Sheinbaum que la mayoría de los ciudadanos apoyamos y que pone punto final al debate que se ha desatado en los últimos días en torno al nepotismo, donde se han evidenciado los intereses de grupos políticos, incrustados en la alianza hegemónica que encabeza Morena en el Congreso, además de que han proliferado los discursos cantinflescos donde los partidarios del nepotismo hicieron declaraciones poco convincentes en las que han mencionado su “compromiso” con el pueblo y la “vocación de servir”, según ellos, para intentar justificar su ambición de poder.
En su respuesta a los cuestionamientos sobre la modificación propuesta por Adán Augusto López y Manuel Velasco, coordinadores de Morena y del PVEM en el Senado, respectivamente, la presidenta Sheinbaum planteó: “¿Quién va a sancionar si se postula a un familiar? El pueblo. No se va a ver muy bien el partido que vaya a postular a un familiar”.
Este jueves reiteró que el pueblo no está de acuerdo con que se quede una familia durante más de seis años, en el caso de los gobiernos estatales y más de tres años en el caso de las presidencias municipales. Asimismo, celebró que Morena anunciara la modificación de sus estatutos para alinearlos con la reforma presidencial contra el nepotismo.
En el marco del 108 aniversario de la Constitución de 1917, el 5 de febrero, la presidenta Sheinbaum anunció que enviaría al Congreso de la Unión dos reformas constitucionales con las que se garantizaría la no reelección y la prohibición expresa del nepotismo en cargos de elección popular.
“Hoy, 5 de febrero, no puedo dejar pasar la fecha – dijo la mandataria -, así que estoy enviando al Congreso de la Unión dos nuevas reformas constitucionales.
La primera: En honor a la Constitución de 1917, la no reelección a ningún puesto de elección popular. ¡Sufragio efectivo, no reelección! La segunda: La prohibición expresa de que ningún familiar pueda suceder de manera inmediata a otro tratándose de un puesto de elección popular, es decir, no al nepotismo.
Nuestra lucha por la democracia y contra cualquier forma de corrupción son un asunto de principios”, aseveró.
La reforma de Sheinbaum propone que desde 2027 se impida que personas aspirantes a un cargo en el Congreso federal, gubernaturas, diputaciones locales, presidencias municipales, regidurías y sindicaturas participen en las contiendas en caso de que en los tres años previos hayan tenido un vínculo de concubinato, relación de pareja o matrimonio.
Esa limitante también aplica si el vínculo es de parentesco por consanguinidad o civil en línea directa, sin limitación de grado, y en línea colateral hasta el cuarto grado, o de afinidad hasta el segundo grado, con la persona que esté ejerciendo la titularidad de ese cargo.
Sin embargo, durante la presentación de reservas de la iniciativa en el Senado, el coordinador de la bancada morenista, Adán Augusto López, presentó la modificación al artículo segundo transitorio que cambia el periodo de entrada en vigor para el periodo de 2027 hasta 2030.
López afirmó que la reserva la presentó también a nombre del coordinador del PVEM, Manuel Velasco, quien horas antes había informado que estaban “negociando” para que la reserva fuera aprobada por los partidos oficialistas. La reserva fue admitida por 97 votos a favor y 26 en contra. Y abrió la posibilidad para que la senadora del PVEM, Ruth González Silva, esposa del gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo, pudiera contender para sucederlo en cargo; misma oportunidad que se les abrió a Félix Salgado Macedonio en Guerrero y Saúl Monreal en Zacatecas.
Afortunadamente los planteamientos de la presidenta Sheinbaum han logrado frustrar estas ambiciones nepotistas, aunque generaron molestia y enfrentamientos entre algunos legisladores de la 4T; situación que puede marcar el inicio del deslinde entre lopezobradoristas, arribistas y chapulines con los partidarios de la presidenta Sheinbaum, que dicho sea de paso, mantiene un gran apoyo, de 80 por ciento, en las recientes encuestas.
Alfonso Ramírez Cuéllar, vicecoordnador de los diputados de Morena, señaló que la ley contra el nepotismo presentada por la presidenta Sheinbaum es “la expresión de una inconformidad nacional” y que trabajarán para que esta reforma se aplique a partir de las elecciones de 2027. Aunque esto provocó el rechazo del senador del PVEM, Manuel Velasco, quien replicó que “Ramírez Cuéllar tiene un interés personal en querer ser candidato a gobernador de Zacatecas”, en una desafortunada declaración que mostró la afinidad del güero Velasco con el clan Monreal.
Sin embargo, la presidenta nacional de Morena, Luisa María Alcalde Luján, anunció ayer que se promoverán cambios en los estatutos morenistas para no postular a cargos públicos a familiares a partir de las elecciones locales de este año (en Durango y Veracruz), además de 2027, como lo propuso originalmente la presidenta Sheinbaum.
Mientras tanto, Manuel Velasco en entrevista con Joaquín López Dóriga en su noticiero de Radio Fórmula, aseguró que “nunca hubo un chantaje de su bancada para aprobar la reforma constitucional que prohíbe el nepotismo y la no reelección”, sino que ellos (los del PVEM) realizaron “un planteamiento, que fue avalado en lo particular por el 90 por ciento de los senadores”.
“Nunca dimos una declaración en contra ni de chantajes mucho menos. Sí hicimos un planteamiento de que fueran homologadas ambas fechas, tanto la de la reelección como la del nepotismo y se planteó que fuera en 2030”, dijo Velasco a López Dóriga. RDM