La inseguridad es uno de los compromisos más importantes que promovió al llegar a la presidencia Andrés Manuel López Obrador, sin embargo, es una de las metas incumplidas más importantes a poco más de tres años de gobierno, la impartición de justicia y el cuidado del medio ambiente son otras de las promesas de las que tampoco hay avances, pero sí retrocesos.
El presidente presentó un decálogo previo a ganar las elecciones en 2018, de lo que serían sus principales ejes de gobierno, pero hasta ahora no se han cumplido ninguna de sus metas, la percepción de inseguridad entre la población aumentó del 66.4 por ciento en marzo al 66.6 por ciento en junio, de acuerdo con la encuesta trimestral divulgada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El primer punto que destacó el presidente en su decálogo fue la “aplicación de la ley al pie de la letra el criterio de que, al margen de la ley nada, y por encima de la ley nadie”.
Sin embargo, hechos como haber puesto en libertad a Ovidio Guzmán, o contar entre su gabinete con personajes bajo la lupa de la ley como Manuel Bartlett Díaz al frente de la CFE, cuestionan esa promesa.
También, de acuerdo con cifras oficiales, durante el gobierno de Calderón hubo más de 30 mil homicidios dolosos; en el de Peña Nieto más de 42 mil y en lo que va del de López Obrador ya hay 87 mil 271, derivado de estas cifras, actualmente México está clasificado como uno de los 25 países más peligrosos del mundo, y seis ciudades mexicanas son las más violentas del orbe.
En materia de política exterior y eliminar privilegios, el presidente planteó: “Mantendremos una relación de amistad y cooperación para el desarrollo con el gobierno de Estados Unidos, pero no aceptaremos el maltrato a los migrantes ni actitudes racistas, hegemónicas o prepotentes”, además que se comprometió a “suprimir fueros”.
Ambos temas, hasta la fecha siguen sin registrar avances significativos, y aún se siguen registrando tratos vergonzosos a personas migrantes, mientras que los gobiernos de Donald Trump y el actual de Joe Biden, siguen en la sombra sin resultados contundentes que impacten en la población mexicana que reside en los Estados Unidos.
Cifras recientes, reveladas por organizaciones independientes, especialistas y el Inegi, reportaron que el promedio de asesinatos dolosos supera los 100 diarios, y los feminicidios los 10, mientras que en Estados Unidos se afirma que entre el 30-35 por ciento del territorio está controlado por el crimen organizado, y se registran actos de narcoterrorismo
En tanto, en el sector energético, López Obrador se comprometió a promover las energías limpias, así como la modernización de las seis refinerías existentes y la construcción de dos más.
Por su parte, la Secretaría de Energía (Sener) reconoció este mes, que se quedará por debajo de la meta de 35 por ciento de generación con fuentes limpias para 2024, a la que se comprometió en el Acuerdo de París, en 2016.
Lo anterior, conforme a lo previsto en su recién publicado Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen) 2021-2035, México alcanzará sólo 31 por ciento de la generación con fuentes limpias (hidroeléctrica, solar, eólica y nuclear).
De igual forma, el presidente reconoció que de las dos refinerías se concretará solo una, la de Dos Bocas, en Tabasco, con todos los problemas que ha venido arrastrando, y que incluso ya hacen dudar si ese proyecto estará listo en este sexenio.
Mientras que la compra de la refinería Deer Park, en Texas, a la compañía petrolera estadounidense Shell, a un costo de casi 600 millones de dólares, endeudará aún más a Pemex que cuenta con las peores calificaciones por parte de las evaluadoras internacionales y es una de las petroleras más endeudadas en todo el mundo.
En tanto, la CFE no cuenta con presupuesto ni certidumbre para los proyectos en auditorías y también presenta graves adeudos, sin considerar la múltiples fallas y apagones que durante todo el año mantienen dañada la economía y a la población.
Del decálogo promovido por el presidente, no se ha cumplido al cien por ciento ninguna promesa en materia de salud, seguridad, justicia y becas, en tres años de gobierno la 4T no ha cumplido completamente una sola de sus metas y sí ha reconocido que ni finalizando este sexenio logrará cumplir, por ejemplo, ninguna de sus metas en el sector energético.