No Pasa Nada
Por: Jesus Solano Lira
En Veracruz, el horno no esta para bollos, y cada vez son más evidentes las patadas bajo la mesa, los jaloneos y hasta las acusaciones de extorsión entre los principales dirigentes de Morena en la entidad, donde el fuego amigo está a todo lo que da.
Lo que era un secreto a voces y chisme de pasillo, llegó hace unos días a la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, en la que acusaron al presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Veracruz, Esteban Bautista Hernández, de incumplir convenios de publicidad para golpear a la administración de la gobernadora Rocío Nahle.
Se dice que el profesor rural y ex guerrilleros del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional, sabe como se las gastas los pseudoperiodistas en el estado, quienes a la voz de “arriba las manos, está es una entrevista”, extorsionan lo mismo a políticos, servidores público, prestadores de servicios y hasta comerciantes, y que ha mantenido en nómina a muchos de ellos, que actúan en bloque para golpear a sus enemigos políticos.
En conferencia el diputado local de Morena, presumió que trae “una escuela de muchos años, yo no estoy aquí por una decisión personal, estoy sirviendo a Veracruz; piensan que vengo llegando y apenas vine a posicionarme y no; por eso se acabaron los negocios sucios, aquí en el Congreso no caben los que extorsionaban a los alcaldes, que mandaban a sus empresas a auditar”, y la pregunta sin ofensa, es por qué lo exhibieron y por qué no se ha hecho la limpia que tanto prometió.
Y mientras son peras o son manzanas, en el sur de Veracruz, Morena ya no siente lo duro sino lo tupido, y en su afán por limpiar la imagen de la presidenta municipal de Sayula de Alemán, Lorena Sánchez Vargas, ándele esa mera, a la que le renunció su Cabildo por los actos de corrupción en que ha incurrido, por la falta de recursos para liquidar las campañas de publicidad que convino con varios medios nacionales.
Por cierto, los síndicos y regidores que renunciaron en marzo pasado, acusaron que la situación y malos manejos de la alcaldesa Lorena Sánchez Vargas, son insostenibles, y a pesar de que presentaron las denuncias ante el Congreso local y la Fiscalía de Justicia de Veracruz, a la fecha No Pasa Nada, y con el sello de la casa han cobijado con un manto de impunidad a Sánchez Vargas.
Los funcionarios que renunciaron, en su momento, acusaron a la alcaldesa de Sayula de Alemán de un daño patrimonial documentado por el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS), de 58 millones, 461 mil 619 pesos en la cuenta pública de 2022, y de 12 millones, 38 mil 448 pesos, en la cuenta pública de 2023, quúboles buena que salió para la tranza Lorena Sánchez Vargas.
Ahhhh, pero el asunto no para ahí, ya que, además de la malversación de recursos, los ediles denunciaron abuso de autoridad y protección a huachicoleros, y argumentaron que no querían ser partícipes del saqueo de los recursos municipales liderados por la alcaldesa Lorena Sánchez Vargas, lo bueno es que no eran iguales al PRI, PAN y PRD, noooo, resultaron peores.
Si a eso le agregamos que Veracruz sigue en el ranking de los estados más inseguros, como lo documentó la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, que señala que el 79.3 de la población considera inseguro vivir en el estado, amén de que se mantiene entre las principales entidades con mayores casos de extorsión, pero al parecer, eso es lo que menos importa a Morena que sólo busca mantenerse como el partido único y hegemónico.
Por cierto, de acuerdo con datos oficiales, en Veracruz la extorsión es uno de los delitos de mayor impacto sobre las personas y su patrimonio, y escaló un 55 por ciento en el sexenio de Cuitláhuac García Jiménez, uno de los peores gobernadores que ha tenido Veracruz, y mire que los ha tenido malitos, pero García Jiménez, no es malo, es maleta.
En el sexenio pasado, la extorsión se convirtió en uno de los delitos de mayor crecimiento en Veracruz y, al momento, no ha sido frenada.
Ahí le van unas cifras: entre 2018 y 2024, el número de denuncias aumentó 62.28 por ciento, al pasar de 578 a 938 casos, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), con lo que entidad veracruzana, registró una tasa de 10.7 extorsiones por cada 100 mil habitantes, superior al promedio nacional de 7.8. Y así como va Morena, difícilmente podrá erradicar ese delito en el corto plazo, si es parte del problema.