Por Roberto Bravo
Para Rosa Luxemburgo
El Gordo Juan y yo jugábamos Turismo
compramos propiedades con billetes de cartón
en una ruta por la que nos llevaron dados con números
en un carrito de plástico
Fue como hacer un doctorado en Harvard
Mi compañero de juegos se hizo hombre de negocios
posee cadenas de comercios, helicópteros, aviones
barcos, automóviles, minas, hijos, amigos, artistas,
escritores, galerías, y come hasta pesar
más de trecientos kilogramos
Con los mega-beneficios –en estos tiempos digitales
el Gordo Juan adquiere otros pulpos corporativos
sus tentáculos controlan las ramas
géneros y subgéneros del lucro
en los siete mares
El departamento de personal en este más allá
de los tiempos modernos es de Recursos Humanos
La hermosa Tierra es la hiedra
que este aprendiz de brujo hizo
Recursos Naturales
Para multiplicar el pan y los peces
al necesario dinero lo volvió
Recursos Financieros
Con otros –sus iguales
juega pokar con las industrias
y con lo que Benito Solís Luna
llamó factores de la producción
Luxemburgo, Rosa entre las rosas
acertó al vaticinar el fin de esta adicción
cuando la madreselva se apodere de su jungla
y de los bosques del mundo
Hasta entonces será libre y feliz
Honestamente, dice el gato
de las siete suelas
Siendo cristalinos y apaciblemente claros
son nuestras las monedas que pagamos
el apagador del televisor está en la mesita de al lado
el puño que golpea es tuyo
también el dedo en el gatillo
el control está en nuestras temblorosas manos
El Gordo Juan es solamente un tigre de papel.
Tomado de Cuaderno Mexicano