Los fuertes vientos propagaron el incendio forestal más grande en la historia de Texas en más de 1 millón de acres de pastizales en Panhandle, el corazón de la región productora de ganado del estado, y hasta Oklahoma a fines de febrero de 2024. Las ligeras precipitaciones del 29 de febrero ayudaron a los bomberos en su intento. para contener el incendio Smokehouse Creek y otros incendios que amenazan hogares y ganado, pero se pronosticó que el calor y los vientos aumentarían nuevamente. Al menos dos personas han muerto.
Karen Hickman, ecologista de pastizales de la Universidad Estatal de Oklahoma y presidenta de la Society for Range Management, explicó por qué los incendios se propagan tan rápido, los riesgos para el ganado y la rapidez con la que estos ecosistemas pueden recuperarse.
¿Cómo se propagaron tan rápido los incendios?
Esta región de Texas y Oklahoma es principalmente pastizales donde pasta el ganado. Una combinación de temperaturas superiores a la media y baja humedad habían secado las plantas latentes. Cuando los vientos aumentaron después de un par de días calurosos y secos, todo lo que hizo falta fue una chispa para iniciar un incendio forestal.
El Panhandle de Texas está compuesto principalmente por especies de praderas de pasto corto que evolucionaron con el fuego. Pero Texas también tiene campos del Programa de Reservas de Conservación plantados con especies perennes que pueden ser pastos medianos o altos. Esos pastos más altos tienen una mayor carga de combustible que puede alimentar un incendio más que las especies de pastos cortos.
Al otro lado de la frontera, esa zona de Oklahoma es más accidentada y tiene otro problema: una gran cantidad de cedros rojos orientales que son nativos pero se han expandido como especies invasoras debido a la falta de incendios periódicos. Cuando los cedros maduros se queman, pueden hacer volar brasas, lo que aumenta el riesgo para los hogares y las ciudades.
Cuando los incendios se propagan tan rápido, a menudo significa que las brasas vuelan por delante del fuego real y a través de cualquier posible cortafuegos que exista.
El cambio de dirección del viento (a veces cambiaba de dirección dos o tres veces al día) también hizo que el incendio fuera más difícil de controlar. Los equipos de bomberos y ganaderos pueden intentar proteger el área delante del incendio, sólo para ver cómo el viento cambia y lleva el fuego en otra dirección. Es peligroso para las personas y el ganado y dificulta detener la propagación del fuego.
¿Qué hay en el camino de estos incendios?
Esas tierras están descansando durante la temporada de inactividad o siendo pastadas por el ganado en esta época del año, y también hay nuevos terneros. Los productores ganaderos de Texas han estado tratando de trasladar su ganado a un lugar seguro, pero en algunos casos tuvieron que cortar las cercas y dejar que el ganado se fuera solo.
En los cañones y terrenos más accidentados de Oklahoma, puede ser aún más difícil sacar al ganado porque se internan en los cañones para alejarse de los fuertes vientos.
Para los productores ganaderos, las necesidades inmediatas serán ahorrar y luego reunir nuevamente sus rebaños.
Algunos rebaños morirán en el incendio y algunas reses resultarán heridas. Incendios como estos también queman cercas y dañan los molinos de viento que alimentan los pozos, y pueden derretir los tanques de agua de plástico. Por tanto, muchos productores tendrán que buscar nuevas fuentes tanto de alimento como de agua para sus animales. Las viviendas también están en riesgo y varias se han quemado.
Los pastizales están dominados por personas que apoyan a sus vecinos, por lo que, por lo general, los condados circundantes ofrecen donaciones. Existen algunas preocupaciones sobre el heno de áreas más lejanas y el riesgo de especies invasoras. El Panhandle vio eso con las hormigas rojas importadas que llegaron en fardos de heno después de los incendios de 2018. Pero la preocupación inmediata de los ganaderos es proporcionar comida y agua a su ganado.
¿Qué tan rápido pueden recuperarse los pastizales?
Los pastos podrán volver a brotar y recuperarse con bastante rapidez. Durante el invierno, están vivos bajo tierra. Sólo se quemó la parte muerta de las plantas en la superficie.
En aquellos sistemas con plantas perennes, una vez que llueve y las temperaturas aumentan, los pastos y las hierbas volverán a brotar en unas pocas semanas. Las plantas se recuperarán bien siempre que no suframos una sequía prolongada.
Los pastizales podrían incluso verse beneficiados si el fuego elimina especies invasoras como el cedro rojo oriental en Oklahoma. En algunas zonas, la gente ha dudado en realizar quemas prescritas, lo que ha provocado un crecimiento excesivo de plantas leñosas, como el zumaque y el ciruelo. Si el fuego elimina parte de ese crecimiento excesivo y el cedro rojo oriental, la hierba de la pradera y las especies herbáceas se regenerarán en esas áreas, restaurando el hábitat de la vida silvestre.
Cuando la vegetación se quema, la superficie negra aumentará la temperatura del suelo, activando los pastos perennes y promoviendo el rebrote. Esto acelera su crecimiento.
Estos son ecosistemas realmente resilientes. Pero la preocupación inmediata en las próximas semanas es que los productores de ganado encuentren formas de alimentar y abrevar a su ganado mientras las plantas nativas de los pastizales vuelven a crecer.
Proporcionado por La Conversación
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