Por Gilberto Celis
En estos días nuestros todo es imagen. Le digo porque ofrezco la disculpa necesaria por reclamar desde hace años lo que los monitos sabios de la ceguera, mudez y sordera sitúan en un cuento de nunca acabar, como “el gato que tenía los pies de trapo y los ojos al revés, ¿quieres que te lo cuente otra vez?”.
Permítame darle un pormenor. En la actual circunstancia bacteriana del mortal Covid-19, los del común en la visita de AMLO a Oaxaca, pidieron establecer un hospital Covid en la zona norte del Istmo de Tehuantepec. ¿Qué responde?, centraron. Y tras señalar la existencia en la Ciudad de Oaxaca y en Juchitán, con la mayor tranquilidad mencionó que hace años en Matías Romero se había construido un Hospital que no podría operar por la corrupción original de situarlo en una barranca y la inseguridad del edificio por las afectaciones de los terremotos del 2017
— Sin duda describió lo que había observado en su visita a la histórica ciudad ferrocarrilera, pero le faltó procesar esa información, de la observación y comparación hecha, para establecer un resultado.
— O sea, ni si, ni no, antes bien todo lo contrario.
¿Cuál es el coraje?
Como se trata de precisiones muy necesarias, le digo que si los municipios de la zona norte del Istmo de Tehuantepec, que asisten al Hospital de Campo Bienestar No. 37 ubicado en la Ciudad de Matías Romero, la Cabecera política del Distrito Local 11, en situaciones regulares manifiestan la no capacidad de respuesta institucional instalada, menos en un estado de indefensión sanitaria al no contar con los adecuados medios públicos de asistencia social.
— Inermes ante la Nueva Normalidad que al contribuir potencialmente a la transmisión del virus, reactiva la Nueva Mortalidad; y desamparados, ante la letal, mortal bacteria Covid-19, están condenados al exterminio.
Le digo estas consideraciones por mi asombro ante las indiscutibles ejecuciones por el Poder Ejecutivo Federal de AMLO al restringir y anular el derecho a la salud y a la vida de la población en 6 municipios de la zona norte del Istmo de Tehuantepec.
— Matías Romero, Santa María Petapa, Santo Domingo Petapa, el Barrio de la Soledad, San Juan Guichicovi, Santa María Chimalapa, en estado de indefensión sanitaria.
Al caso, las condiciones epidemiológicas maquilladas, para mejor operación del Semáforo bacterial Covid-19, a conveniencia política electoral 2021 y 2024, prevé el término de la educación a distancia para dentro de dos meses; y en octubre reanudar las clases de manera presencial.
— O sea, ¿se abrirán los campos de concentración 4T para exterminio de quienes “más valientes, mas patriotas y sufridos que nosotros” harán valer su derecho?
— ¿Por eso se organiza el ejército de ninis con haberes de 3 mil 600 pesos?
AMLO debe tomarse las cosas más en serio; si no por el Poder Ejecutivo Federal que tiene como Presidente de México y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas de mar, tierra y aire, al menos por los alrededor de los mexicanos que por él votaron y sus familias.
La Ciudad de Matías Romero, como Origen y Destino en el Siglo de Oro del Ferrocarril Nacional de Tehuantepec, contó con un Hospital Regional de Concentración orgullo del sistema ferroviario y que al Decreto de Extinción de la Empresa pasó a ser activo del IMSS. Seguramente esa hectárea de terreno podrá aún servir a la salud; porque, sabe, la historia, la nuestra, no se olvida; y menos se claudica.
— Por eso le digo.
comunicacion_mra@hotmail.com